La Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) alertó que cerca de 33 millones de personas en el Sahel necesitan ayuda humanitaria debido a la inestabilidad, violencia y cambio climático.
Se necesitan urgentemente $4,700 millones para ayudar a 20.9 millones de personas en Burkina Faso, Camerún, Chad, Malí, Níger y partes de Nigeria.
La crisis afecta a 2.2 millones de niños que no pueden acceder a la educación debido al cierre de escuelas y 1,263 centros de salud cerrados.
Dos millones de refugiados y solicitantes de asilo, y 5.6 millones de desplazados internos, enfrentan múltiples desplazamientos. El cambio climático agrava la situación, y se estima que 16.7 millones de personas tendrán dificultades para alimentarse en la próxima estación de escasez de junio-agosto.
La crisis del Sahel también impacta a países costeros como Benín, Costa de Marfil, Ghana, Togo y Mauritania.
La OCHA enfatizó la importancia de la ayuda internacional para crear soluciones duraderas y reducir las necesidades humanitarias en el futuro.




