Arranca la votación anticipada en tres estados de EE.UU. de cara a las elecciones de noviembre

La votación anticipada para las elecciones presidenciales del 5 de noviembre comenzó este viernes en Minnesota, Dakota del Sur y Virginia, dando inicio a la recta final en la carrera por la Casa Blanca, que enfrenta a la demócrata Kamala Harris y al republicano Donald Trump.

Desde primeras horas de la mañana, largas filas de votantes se formaron en los centros de votación de estos tres estados. Los ciudadanos, deseosos de ser los primeros en emitir su voto, acudieron en masa para aprovechar esta opción anticipada, que en los últimos años ha ganado popularidad en todo el país.

En Arlington, Virginia, suburbio cercano a Washington, D.C., importantes figuras demócratas como el senador Tim Kaine y el congresista Don Beyer estuvieron presentes para animar a los votantes a participar desde temprano. Kaine, quien fuera candidato a la vicepresidencia en 2016, describió la contienda como “la elección más importante de su vida”.

“Esta batalla es entre quienes construyen y quienes destruyen”, declaró Kaine ante un grupo de seguidores. “Nos enfrentamos a la persona que más ha destruido en la historia de la política estadounidense: Donald Trump. Y la pregunta es si vamos a plantar cara a gente como él”, dijo, refiriéndose al expresidente republicano.

El ambiente electoral era palpable en las afueras de los centros de votación en Virginia, con pancartas del partido demócrata local que leían “Virginia por Harris” y “Virginia vota temprano”. Se espera que los centros de votación anticipada en este estado permanezcan abiertos hasta el 2 de noviembre, permitiendo a los residentes depositar sus votos de manera presencial.

En Minnesota y Dakota del Sur, los votantes tienen un sistema diferente: pueden entregar sus papeletas anticipadamente en persona a un oficial electoral del estado, en lugar de usar las urnas tradicionales. Estas opciones, diseñadas para facilitar la participación en un país donde las elecciones se celebran un día laboral, han sido ampliamente adoptadas en los últimos ciclos electorales.

Los datos muestran que en las elecciones presidenciales de 2020, un 40% de los votantes en Virginia optaron por la votación anticipada en persona, mientras que en Minnesota la cifra fue del 57% y en Dakota del Sur el 20%. Estas cifras reflejan el aumento en la utilización de esta modalidad de votación, especialmente en estados donde las preferencias políticas están más divididas.

El arranque de la votación anticipada en estos tres estados llega en un contexto electoral tenso. Tras un verano turbulento, el presidente Joe Biden anunció que no buscaría la reelección, dejando la candidatura en manos de su vicepresidenta, Kamala Harris. Por su parte, Donald Trump ha afrontado un periodo difícil, incluyendo dos intentos de asesinato, lo que ha añadido dramatismo a la ya polarizada campaña.

Las encuestas anticipan una contienda reñida, con Harris y Trump compitiendo cabeza a cabeza en varios estados clave, entre ellos Pensilvania, Míchigan, Wisconsin, Georgia, Carolina del Norte, Arizona y Nevada. Estos territorios jugarán un papel crucial para decidir el futuro ocupante de la Casa Blanca.

Con la participación anticipada en marcha, Estados Unidos entra en una fase decisiva que determinará el curso de las elecciones más esperadas y comentadas de la historia reciente del país.