Ejecutan a ex sicario de Los Zetas en Monterrey

Monterrey — Un presunto ex sicario del cártel de Los Zetas, quien en los últimos años se había dedicado a predicar en iglesias cristianas, fue asesinado el domingo por la tarde en la colonia Argentina, al norte de Monterrey. El ataque ocurrió minutos después de que terminara un culto cristiano en una bodega que era utilizada como templo.

El fallecido fue identificado como Isaacar Martínez Alvarado, de 39 años, quien quedó sin vida en el interior del inmueble tras recibir al menos 10 disparos. Durante el tiroteo, su esposa, San Juana, de 27 años, resultó lesionada en el antebrazo derecho y fue trasladada a un hospital para recibir atención médica.

El ataque ocurrió alrededor de las 15:30 horas, cuando tres hombres armados, vestidos de negro, irrumpieron en el lugar ubicado en la calle Francisco Beltrán, entre Ildefonso Vázquez y Nueva Rosita. Los atacantes localizaron a Martínez Alvarado mientras este se encontraba acompañado de familiares y, sin mediar palabra, abrieron fuego contra él. Las balas también alcanzaron a su esposa, quien se encontraba cerca de la víctima.

De acuerdo con fuentes periodísticas, Martínez Alvarado había sobrevivido a un ataque en abril de 2020 en la misma colonia, cuando un pistolero intentó asesinarlo frente a su casa. En esa ocasión, su padre se lanzó sobre él para protegerlo con su cuerpo, evitando que lo mataran.

Tras sobrevivir a ese primer atentado, el ahora occiso se alejó de la vida delictiva y comenzó a dar testimonios sobre su regeneración en iglesias cristianas, donde compartía su experiencia como sicario del grupo delictivo Los Zetas y su conversión religiosa. Parte de esos testimonios pueden encontrarse en la plataforma de videos YouTube.

La escena del crimen fue acordonada por elementos de la Policía de Monterrey, mientras agentes ministeriales y peritos de la Fiscalía General de Justicia recolectaban pruebas en el lugar. En total, se aseguraron 10 casquillos de calibre .40 dentro del inmueble.

Las autoridades continúan investigando el caso para dar con los responsables del asesinato, mientras la comunidad cristiana local lamenta la pérdida de quien, en los últimos años, se había esforzado por cambiar su vida y ayudar a otros a través de su fe.