ONG alertan que expansión del cerco fronterizo en Texas pone en peligro a migrantes
Ciudad Juárez, México, 25 de septiembre de 2024. La ampliación del cerco fronterizo entre Texas y México, impulsada por el gobernador texano Greg Abbott, ha generado una ola de críticas y preocupaciones por el impacto en la seguridad de los migrantes y la capacidad de respuesta en emergencias. La nueva expansión afecta zonas cercanas a Nuevo México, lo que aumenta los riesgos para los migrantes varados en Ciudad Juárez, denunciaron organizaciones civiles este miércoles.
Abbott ha justificado la medida como una acción necesaria para enfrentar la “crisis migratoria” en la frontera sur de Estados Unidos, específicamente en El Paso, que limita con Ciudad Juárez y es uno de los principales puntos de cruce de migrantes. La ampliación incluye la instalación de nuevas barreras físicas, como alambradas de púas y dispositivos flotantes en el río Bravo.
Rosa Mani Arias, coordinadora de Servicio al Migrante en la asociación Avara Juárez, calificó la situación como “muy desafortunada” y expresó su preocupación por el aumento de los riesgos para los migrantes. “Hay personas a las que es casi imposible acceder para brindarles todo el apoyo del rescate, y las vidas están definitivamente en un riesgo constante”, afirmó. Además, subrayó el peligro particular que enfrentan los niños en esta situación.
Los bomberos de Sunland Park, una localidad en Nuevo México cercana a la frontera, han advertido que las nuevas barreras dificultarán su capacidad de respuesta ante emergencias en la zona. Esta expansión también ha sido criticada por Juan Carlos López, vocero de la diócesis de Ciudad Juárez, quien señaló que las medidas podrían desencadenar una “crisis” al entorpecer el rescate y la asistencia a migrantes en peligro.
Las tensiones entre México y Texas han aumentado desde julio de 2023, cuando Abbott implementó barreras como alambres de navajas y un cerco de boyas en el río Bravo, medidas que el presidente Andrés Manuel López Obrador calificó de “inhumanas”. Pese a las órdenes del Gobierno de Estados Unidos y de la Suprema Corte para retirar estas instalaciones, y las quejas diplomáticas de México, Texas ha mantenido su postura, incluso ante incidentes trágicos como el ahogamiento de una mujer mexicana y sus dos hijos en Piedras Negras, Coahuila, el pasado 14 de enero.
Con la reciente expansión, el cerco fronterizo ahora afecta áreas más allá de la frontera directa entre Texas y México, incluyendo partes de Sunland Park. Organizaciones civiles y autoridades locales siguen manifestando su preocupación por el impacto de estas medidas, no solo en la seguridad de los migrantes, sino también en la capacidad de respuesta ante emergencias en la zona.
