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Trump asegura que pedirá pena de muerte para migrantes que asesinen a estadounidenses

El expresidente y actual candidato presidencial republicano, Donald Trump, intensificó su retórica antiinmigrante este martes, al prometer nuevamente deportaciones masivas y una condena de 10 años para cualquier migrante que regrese a Estados Unidos después de haber sido expulsado. Además, planteó una propuesta aún más extrema: solicitar la pena de muerte para migrantes convictos de asesinar a ciudadanos estadounidenses.

“Tenemos que hacerlo… Estoy pidiendo la pena de muerte para cualquier migrante que mate a un ciudadano estadounidense o a un agente de las fuerzas del orden… el Congreso lo va a aprobar”, afirmó Trump ante una multitud en Greensboro, Carolina del Norte. Esta fue su cuarta visita en dos días a uno de los siete estados clave que definirán la elección presidencial de 2024.

Carolina del Norte, con 16 votos electorales, es un campo de batalla crucial, donde las encuestas muestran una contienda muy reñida entre Trump y la vicepresidenta Kamala Harris. Aunque se esperaba que Trump se enfocara en los esfuerzos de recuperación tras el huracán Helene, que dejó más de 230 muertos, gran parte de ellos en ese estado, el candidato dedicó casi dos horas a repetir su mensaje antiinmigrante, criticando además la respuesta del Gobierno federal al desastre.

Durante su discurso, Trump afirmó que la inmigración es el tema que más preocupa a los estadounidenses, por encima incluso de la economía, una estrategia que ha utilizado para ganar apoyo entre sus seguidores. Sin embargo, una reciente encuesta de Gallup señala que la economía sigue siendo el tema más importante para la mayoría de los votantes (52 %), mientras que la inmigración ocupa el quinto lugar en una lista de 22 temas clave.

Pese a los datos, Trump insistió: “Creo que la inmigración es el número uno, y el segundo es la economía, y el tercero es la inflación… la frontera es la mayor amenaza para este país”.

También aprovechó para atacar nuevamente a su rival, Kamala Harris, a quien acusó de mantener “fronteras abiertas”, a pesar de que las políticas de asilo del gobierno de Joe Biden han logrado reducir los arrestos en la frontera suroeste a cifras menores que en 2020, según datos recientes.

Además de sus propuestas sobre inmigración, Trump presumió del apoyo de los agentes de la Patrulla Fronteriza y repitió acusaciones contra los migrantes, a quienes calificó de traficantes de drogas, violadores y delincuentes.

Trump también lanzó insultos contra Harris, sugiriendo que no estaba a la altura de liderar el país y repitiendo comentarios despectivos que había hecho más temprano en otro mitin en Miami.