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Señalan “avances” en la investigación de la masacre en bar de Querétaro; atribuye el ataque a conflicto entre cárteles

En conferencia de prensa desde Palacio Nacional, Omar García Harfuch, secretario de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), informó sobre avances en la investigación de la masacre ocurrida el pasado fin de semana en el bar ‘Los Cantaritos’ de Querétaro, en la que diez personas perdieron la vida. El titular de la SSPC vinculó el ataque a la rivalidad entre dos facciones delictivas: el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y el Cártel de Santa Rosa de Lima.

García Harfuch explicó que este hecho es el tercero de su tipo que ocurre en Querétaro y que guarda relación con conflictos que también involucran a Guanajuato. Recordó un ataque similar ocurrido el pasado 7 de noviembre en un restaurante, donde tres personas fueron asesinadas. “Este último evento está relacionado con esa agresión; es una rivalidad entre dos células delictivas. Estamos en investigación en conjunto con el Gobierno del estado”, señaló.

Durante la rueda de prensa, el funcionario detalló que los dos ataques, el del 7 de noviembre y el de ‘Los Cantaritos’, están relacionados. Los grupos implicados son células de los cárteles CJNG y Santa Rosa de Lima, en disputa por el control de la zona.

Sobre el modus operandi, García Harfuch explicó que los agresores, armados, llegaron al bar queretano preguntando por un individuo llamado Fernando. Al ingresar al establecimiento, dispararon contra las personas presentes, provocando una escena de caos y temor entre los clientes. El ataque dejó un saldo de diez muertos, varios heridos y una persona detenida, de la cual no se han dado detalles.

El secretario también informó que hoy se reunirá con el gobernador de Querétaro, Mauricio Kuri, para coordinar los esfuerzos en la investigación y reforzar la seguridad en la entidad. “Hay avances en la investigación y les mantendremos informados”, aseguró García Harfuch.

Este incidente ha generado gran conmoción en Querétaro, una ciudad reconocida por su tranquilidad y su estatus como Patrimonio de la Humanidad, en la que no suelen ocurrir actos de violencia de esta magnitud. Videos difundidos en redes sociales muestran a clientes, incluidos mujeres, tirándose al suelo para protegerse de las balas.