California se prepara para posibles enfrentamientos con el gobierno de Trump
Ante el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca, el gobernador de California, Gavin Newsom, y la Legislatura estatal han tomado medidas proactivas para proteger los intereses del estado. Este lunes, inició una sesión especial que busca anticiparse a las políticas del próximo gobierno federal, aprobando un fondo inicial de 25 millones de dólares destinado a futuros litigios legales.
El monto será administrado por el Departamento de Justicia de California y otras agencias para responder a posibles “extralimitaciones” de la administración republicana en temas críticos como inmigración, cambio climático y derechos reproductivos.
En un comunicado citado por el Los Angeles Times, Newsom expresó su disposición para colaborar con el nuevo gobierno, aunque dejó claro que California está lista para defender los derechos y libertades de sus habitantes:
“Eso es exactamente de lo que se trata esta sesión especial: preparar a este estado para el éxito, independientemente de quién esté en la Casa Blanca.”
Se espera que las tensiones aumenten, dado el historial de desacuerdos entre Trump y California durante su primer mandato. El estado, que es la quinta economía mundial, ha mantenido políticas progresistas en áreas como:
Inmigración: California es un estado santuario que limita la cooperación entre autoridades locales y agentes federales de inmigración.
Cambio climático: Ha liderado iniciativas para reducir emisiones y promover energías limpias, en contraste con las políticas favorables a combustibles fósiles de Trump.
Derechos reproductivos: Ha defendido el derecho al aborto frente a las restricciones impulsadas por los republicanos.
En su mandato anterior, Trump llegó a amenazar con retirar fondos federales destinados a combatir los incendios forestales, culpando a la gestión estatal de los desastres. En respuesta, Newsom ha viajado recientemente a Washington para asegurar recursos federales antes de que la nueva administración tome posesión.
Este movimiento subraya la voluntad de California de mantener su independencia política y su liderazgo progresista, incluso en medio de posibles conflictos con el gobierno federal.