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Protesta en la FIL de Guadalajara: familiares de desaparecidos exigen justicia

Colectivos de búsqueda de personas desaparecidas y familiares de defensores de derechos humanos realizaron una protesta este viernes en la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara, demandando justicia y la localización de sus seres queridos.

En la entrada principal del recinto, una veintena de manifestantes colocaron carteles con las siluetas y fotografías de sus familiares, acompañadas de frases que narraban su historia personal y las circunstancias de su desaparición. “Queremos que la sociedad los conozca y se sensibilice, que cada persona desde su espacio se sume a esta causa”, expresó un representante del movimiento.

Durante el acto, familiares tomaron el micrófono para relatar cómo sus hijas e hijos fueron sustraídos o no localizados, y exigieron mayores recursos por parte de las autoridades para la búsqueda en vida, en campo, y un acompañamiento integral a las familias afectadas.

Posteriormente, las siluetas fueron colocadas en el suelo junto a veladoras y flores, formando un altar simbólico junto a los rostros de defensores de derechos humanos asesinados en los últimos años. Entre las consignas coreadas por los manifestantes destacaron: “¡Vivos se los llevaron, vivos los queremos!” y “¿Por qué les buscamos? ¡Porque les amamos!”.

La protesta ocurre en un contexto crítico para Jalisco, entidad que registra más de 15 mil personas no localizadas, convirtiéndose en el estado con mayor número de casos en México. Apenas unas horas antes, Pablo Lemus asumió como nuevo gobernador, enfrentando una de las problemáticas más urgentes en la región.

La FIL, que este año celebra su edición 38 con España como país invitado, ha sido también escenario de otras manifestaciones sociales. En días recientes, organizaciones han protestado por el conflicto entre Israel y Palestina y por la libertad de expresión en México.

La feria, que reúne a más de 850 autores de 43 países y organiza alrededor de 3 mil actividades literarias, se ha convertido en un espacio no solo de celebración cultural, sino también de alzamiento de voces por justicia y derechos humanos.