Sheinbaum desmiente amenazas al Poder Judicial y cuestiona corrupción y nepotismo en la SCJN
La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo rechazó tajantemente las acusaciones de amenazas al Poder Judicial realizadas por Norma Lucía Piña Hernández, presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), durante su segundo y último informe anual.
“Es falso que haya amenazas. Lo que sí es que tiene que haber transparencia en el actuar de las y los jueces. Los primeros que deben cumplir con la Constitución son ellos, y no se puede usar la ley de amparo para liberar delincuentes, incluso de la delincuencia organizada”, afirmó Sheinbaum en su conferencia matutina.
La mandataria defendió las críticas públicas hacia el Poder Judicial, asegurando que no constituyen amenazas, sino la exposición de hechos. Señaló que jueces y magistrados deben rendir cuentas, como cualquier servidor público, y reiteró su postura de que el sistema judicial actual aún representa “el régimen de corrupción y privilegios del pasado”.
Críticas a la transparencia y la “carrera judicial”
Sheinbaum también se refirió a los señalamientos de Piña Hernández sobre la afectación a la “carrera judicial” por las reformas que incluyen el uso de tómbolas para la elección de jueces. La presidenta cuestionó la legitimidad de dichas carreras: “¿Cuál carrera judicial, si el 50 por ciento de quienes trabajan en el Poder Judicial son familiares o amigos, según sus propias palabras? Lo que queremos es acabar con esa corrupción”.
Sheinbaum recordó el documento titulado El poder familiar, difundido previamente por el Poder Judicial, como evidencia de las redes de nepotismo dentro de la institución. Además, señaló que esta reforma no afectará los derechos laborales de los trabajadores judiciales.
Acusaciones de parcialidad y defensa del viejo régimen
La presidenta sostuvo que una parte del Poder Judicial, en particular algunos ministros y ministras de la SCJN, actúan en defensa de un sistema basado en privilegios y corrupción. “Lo que están defendiendo es al viejo régimen, eso es lo que representa la actual dirigencia del Poder Judicial”, apuntó.
Finalmente, Sheinbaum recordó que la reforma judicial se aprobó en el marco de una consulta democrática, desestimando las críticas de que la población desconocía sus implicaciones. Rechazó también que el Ejecutivo busque controlar a la Corte, subrayando que una acción de esa naturaleza hubiera implicado medidas radicales, como las aplicadas durante el gobierno de Ernesto Zedillo, cuando se renovó por completo la integración de la SCJN.
Las declaraciones de Sheinbaum llegan en un contexto de confrontación entre el Poder Ejecutivo y Judicial, mientras se implementan cambios significativos en la estructura del sistema judicial mexicano.