Internacional

Reino Unido confirma la muerte de un ciudadano británico en atentado de Nueva Orleans

Londres, Reino Unido.— El rey Carlos III manifestó su “profunda tristeza” tras la muerte de Edward Pettifer, un ciudadano británico de 31 años, víctima del atentado ocurrido el 1 de enero en Nueva Orleans, Estados Unidos.

Pettifer, residente del barrio londinense de Chelsea, falleció cuando un atacante arrolló a una multitud que celebraba el Año Nuevo en Bourbon Street. En un comunicado, el Palacio de Buckingham confirmó que el monarca se puso en contacto con la familia del joven para ofrecer sus condolencias.

Detalles del atentado
La tragedia dejó un saldo de 14 muertos y al menos 30 heridos. El sospechoso, identificado como Shamsud-Din Jabbar, de 42 años y originario de Texas, embistió a los peatones con una camioneta antes de salir del vehículo y disparar un arma. Fue abatido en el lugar por la policía.

Según el FBI, el ataque fue un acto “premeditado y malvado”. Durante la investigación, las autoridades encontraron en el vehículo una bandera del Estado Islámico y explosivos, lo que ha llevado a considerar posibles vínculos con terrorismo internacional.

La pérdida de Edward Pettifer
La familia de Pettifer emitió un comunicado en el que expresó su devastación por la pérdida del joven, a quien describieron como un “maravilloso hijo, hermano, nieto, sobrino y amigo de muchos”. Solicitaron privacidad para llorar su partida.

El Ministerio de Exteriores británico y la Policía Metropolitana de Londres están trabajando con las autoridades estadounidenses para repatriar el cuerpo al Reino Unido.

Conexión con la familia real
Medios británicos como The Telegraph destacaron que Pettifer era hijastro de Tiggy Legge-Bourke, quien fue niñera de los príncipes William y Harry en la década de 1990. Este vínculo familiar ha generado un eco significativo en el ámbito público y real.

Contexto de la tragedia
Este atentado ha conmocionado tanto a Estados Unidos como a la comunidad internacional. El alcalde de Nueva Orleans y líderes globales han condenado el ataque, mientras que las investigaciones continúan para determinar si Jabbar actuó de forma aislada o bajo la influencia de redes extremistas.

La muerte de Edward Pettifer simboliza la pérdida de vidas inocentes en un ataque que marca un sombrío inicio de año para ambas naciones.