Internacional

El gobierno de Biden solicita bloquear acuerdo con los acusados del 11-S para evitar la pena de muerte

La Administración del presidente Joe Biden ha solicitado este martes al Tribunal de Apelaciones del Distrito de Columbia que bloquee un acuerdo de culpabilidad en las comisiones militares de la Base Naval de Guantánamo, Cuba, que permitiría al supuesto cerebro de los ataques del 11 de septiembre de 2001, Jalid Sheij Mohamed (KSM), evitar la pena de muerte a cambio de declararse culpable.

El Departamento de Justicia argumenta que las comisiones militares no deberían ser autorizadas a negociar acuerdos de culpabilidad, y pide que se respete la prohibición impuesta en 2023, que impide tales acuerdos. Este pedido se presenta justo antes de una vista judicial programada para este viernes, en la que se esperaba que KSM y otros dos acusados, Walid bin Atash y Mustafa al Hawsawi, se declararan culpables a cambio de evitar la pena capital.

La controversia sobre el acuerdo
El acuerdo con los fiscales de las comisiones militares ha sido ampliamente criticado, especialmente por víctimas de los atentados del 11 de septiembre y el ataque al USS Cole en 2000, que también se atribuye a KSM. Los críticos argumentan que este acuerdo permite a los acusados evitar la justicia plena, incluida la pena de muerte, en lugar de ser sometidos a un juicio público completo sobre los crímenes más atroces cometidos en suelo estadounidense.

La disputa legal
La solicitud de Biden llega después de que la semana pasada una corte de apelaciones militar decidiera que el secretario de Defensa, Lloyd Austin, no tenía la autoridad para invalidar un acuerdo de culpabilidad alcanzado en agosto de 2024, en relación con los atentados del 11-S y el ataque al USS Cole. El Departamento de Justicia argumenta que los tribunales militares no han considerado adecuadamente cómo se llegó al acuerdo y defiende que la autoridad del secretario de Defensa para invalidar dicho acuerdo debe mantenerse.

El impacto de la decisión
La Administración Biden insiste en que permitir el acuerdo de culpabilidad privaría al pueblo estadounidense y al Gobierno de un juicio público en el que los acusados serían condenados por lo que se considera “el acto criminal más egregio cometido en suelo estadounidense en la historia moderna”. Además, la Casa Blanca subraya que este acuerdo despojaría a las víctimas del derecho a un proceso judicial justo, mientras se busca mantener intacta la posibilidad de imponer la pena de muerte.

Obstáculos en el camino judicial
Cabe recordar que las condenas para KSM y otros prisioneros de “alto valor” en Guantánamo han estado bloqueadas durante más de una década debido a que las confesiones de los acusados fueron obtenidas mediante tortura durante la presidencia de George W. Bush. Como resultado, estas confesiones no pueden ser utilizadas como prueba en un juicio formal, lo que complica el proceso judicial.

El futuro del caso dependerá de la decisión del Tribunal de Apelaciones, que podría tener implicaciones de largo alcance para el sistema judicial estadounidense y la lucha contra el terrorismo.