Feminicidio y linchamiento conmocionan a Tekit, Yucatán
Tekit, Yucatán, fue escenario de una tragedia que ha causado indignación y debate en la comunidad. María N., una mujer de 69 años, murió tras ser agredida con un machete por un joven identificado como Ismael Alejandro, conocido como ‘el Wero’. Posteriormente, el presunto agresor fue linchado y quemado por pobladores enfurecidos.
Los hechos
El ataque ocurrió el lunes, cuando María N. se encontraba sentada a las puertas de su casa. Sin mediar palabras, ‘el Wero’ la agredió con un machete, causándole heridas graves. Aunque fue trasladada al Hospital Juárez de Mérida, la mujer falleció debido a la gravedad de las lesiones.
Enfurecidos por lo ocurrido, los vecinos identificaron y capturaron a ‘el Wero’. Lo llevaron a la plaza principal, donde lo golpearon, ataron y le prendieron fuego.
Antecedentes del presunto agresor
En 2021, Ismael Alejandro fue acusado de asesinar con un pico a Víctor, un joven de 28 años, dentro de un anexo en la región. A pesar de ello, el caso no tuvo consecuencias legales claras, lo que ha generado críticas hacia las autoridades locales.
Exigen justicia
Dulce María, hija de la víctima, utilizó las redes sociales para exigir justicia al alcalde José Antonio Sosa Hernández.
“Te habla una hija dolida por la pérdida de mi mamá, y si no hacen justicia nosotros como hermanos lo haremos. Ojalá y no se guarde ni se acobarde ante esta situación”, escribió.
Reacciones oficiales
La Fiscalía General del Estado y la Secretaría de Seguridad Pública de Yucatán informaron la apertura de una carpeta de investigación por el feminicidio y el linchamiento.
El gobernador Joaquín Díaz Mena condenó ambos actos. Expresó su solidaridad con la familia de María N., al tiempo que rechazó el linchamiento como método de justicia.
“Yucatán es un ejemplo de paz y valores. No permitamos que el enojo nos haga olvidar quiénes somos como pueblo”, declaró.
El caso ha desatado un intenso debate sobre la seguridad, la justicia y el impacto de la violencia en una comunidad que tradicionalmente se considera pacífica.