Internacional

Familiares de venezolanos enviados a Guantánamo demandan al gobierno de Trump

Un grupo de organizaciones de derechos humanos presentó una demanda contra la Administración Trump, denunciando que los migrantes enviados a la base naval de Guantánamo, en Cuba, se encuentran incomunicados y sin acceso a garantías legales.

Demanda contra el Gobierno de EE.UU.
La querella, interpuesta por la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU) y el Centro para los Derechos Constitucionales, entre otros grupos, exige información sobre las condiciones de detención y el debido proceso para los afectados.

Entre los demandantes se encuentra Eucaris Carolina Gómez Lugo, quien descubrió la detención de su hermano tras ver una fotografía publicada por el Gobierno de EE.UU.

Acusaciones de vínculos con el Tren de Aragua
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) sostiene que los migrantes trasladados a Guantánamo forman parte de la organización criminal Tren de Aragua. Sin embargo, familiares de los detenidos niegan esta acusación y aseguran que no han podido comunicarse con ellos.

De acuerdo con CBS News, EE.UU. ha enviado al menos 100 migrantes venezolanos a la base naval.

EFE investigó a tres de los detenidos, incluyendo dos mencionados en la demanda, y no encontró antecedentes penales en EE.UU. que los vinculen con la banda criminal.

Falta de transparencia y violaciones de derechos
Los abogados que representan a los migrantes señalan que la Administración Trump no ha proporcionado detalles clave sobre su detención, como la duración de la reclusión, el marco legal que la justifica o las condiciones en que permanecen.

“El gobierno está demostrando su desprecio por el Estado de derecho al aislar a inmigrantes en una instalación remota sin acceso a abogados ni protecciones básicas”, denunció Lee Gelernt, del Proyecto de Derechos de los Inmigrantes de la ACLU.

El DHS defendió su postura y afirmó que los detenidos tienen acceso a comunicación telefónica y asesoría legal.

Sin embargo, la demanda advierte que el plan de la Administración Trump de trasladar a decenas de miles de migrantes a Guantánamo podría establecer un peligroso precedente en materia de derechos humanos.