Madres Buscadoras Fundan el Frente Luciérnagas en el Día Internacional de la Mujer
En una emotiva ceremonia realizada justo antes del amanecer del 8 de marzo, madres buscadoras se reunieron frente a las vallas que rodean Palacio Nacional para recordar a sus hijas desaparecidas, víctimas de feminicidio. Durante el acto, anunciaron la creación del Frente de Madres Buscadoras Luciérnagas, un colectivo formado para exigir justicia y visibilidad en los casos de desapariciones.
María del Carmen Volante Velázquez, madre de Pamela Gallardo Volante, quien fue desaparecida el 5 de noviembre de 2017 en el Ajusco, relató las dificultades que ha enfrentado en la búsqueda de su hija. Señaló que la impunidad ha sido la constante en las investigaciones: “Los juzgadores, los ministerios públicos; todos nos han fallado en las investigaciones; para ellos son solo carpetas, y para nosotras son seres amados, es una hija que con su ausencia se lleva a toda una familia completa”, expresó.
En el marco del Día Internacional de la Mujer, las madres colocaron mantas moradas con las imágenes de sus hijas en la acera, rodeadas de velas artificiales y flores, como una forma de rendir homenaje y, al mismo tiempo, de denunciar la ineficiencia de las procuradurías y la falta de compromiso por parte de las autoridades para resolver los casos. Volante Velázquez aclaró que el Frente Luciérnagas será un movimiento de familias unidas, pero subrayó que las que lideran la lucha son las madres, pues son ellas las que “caminan y siguen buscando”.
Aidé Hernández Ávila, madre de Natali Carmona, desaparecida el 27 de enero de 2019, compartió su angustia al señalar que, durante los tres años en que su hija estuvo desaparecida, la fiscalía de Puebla no tomó en cuenta las denuncias de la familia. A pesar de que la pareja de su hija fue localizada a los 15 días de la desaparición, las autoridades hicieron tres búsquedas sin resultados, y nunca hubo una línea de investigación clara. “La fiscalía y la comisión de búsqueda me vieron la cara, porque fueron tres búsquedas simuladas. En la última búsqueda tuvimos que estar los familiares presentes para demostrarles que, donde decíamos que estaba, efectivamente estaba”, relató con indignación.
Por su parte, Juana López Martínez, madre de una joven de 36 años desaparecida en la comunidad triqui, recordó que en cuanto su hija desapareció el 20 de junio de 2024, acudió a la fiscalía, pero no obtuvo respuesta. Fue gracias a la intervención de un grupo de madres buscadoras que el caso comenzó a avanzar. “Solamente estoy pidiendo justicia”, expresó, visibilizando las dificultades que enfrentan las madres al intentar que sus casos sean atendidos.
Las madres buscadoras continúan enfrentando la falta de acción por parte del Estado, lo que las ha llevado a formar un frente común para exigir el cese de la impunidad y el compromiso real por parte de las autoridades. En sus palabras, la lucha por justicia no solo es personal, sino también colectiva, y está lejos de terminar.