China exige a EE.UU. “detener sus tácticas de presión” ante aranceles acumulados del 145 %
El Gobierno de China advirtió este viernes a Estados Unidos que debe “detener sus tácticas de presión máxima y sus acciones temerarias” si realmente busca resolver las crecientes tensiones comerciales mediante el diálogo y la negociación.
Así lo expresó Lin Jian, portavoz del Ministerio de Exteriores chino, en una rueda de prensa tras los recientes anuncios de la Casa Blanca que elevaron los aranceles a las importaciones chinas a un nivel sin precedentes.
“China nunca ha aceptado la coerción. Cualquier diálogo debe basarse en la igualdad, el respeto mutuo y la reciprocidad”, sostuvo Lin.
Según documentos internos citados por la prensa estadounidense, las importaciones procedentes de China enfrentan ahora aranceles acumulados del 145 %, luego de que el presidente Donald Trump incrementara la tasa al 125 % esta semana, que se suma al 20 % ya vigente desde 2019.
El aumento se produjo tras la decisión del mandatario republicano de excluir a China de la tregua arancelaria de 90 días que concedió a sus demás socios comerciales el pasado 2 de abril.
“No queremos una guerra comercial, pero no la tememos. No hay salida ante el acoso estadounidense mediante concesiones o compromisos”, advirtió el vocero chino.
Beijing afirma que sus medidas de represalia buscan proteger sus derechos legítimos, pero también “salvaguardar las normas internacionales y el orden global” frente a lo que considera una estrategia unilateral y agresiva por parte de Washington.
La tensión entre las dos principales economías del mundo se agudiza justo cuando Trump acelera su agenda económica de proteccionismo comercial en vísperas de las elecciones presidenciales de noviembre. Además del aumento de aranceles, el mandatario ha presionado a empresas estadounidenses a relocalizar fábricas en territorio nacional y ha impuesto nuevas restricciones tecnológicas a compañías chinas.
Lin Jian concluyó que China está “lista para llegar hasta el final” si Estados Unidos mantiene su postura confrontativa, aunque reiteró que su país mantiene la puerta abierta al diálogo, siempre que se dé en condiciones de “equidad y respeto mutuo”.