Finalizan campañas en Ecuador entre abusos de poder de Noboa
Este domingo, Ecuador vivirá un balotaje decisivo entre dos proyectos políticos profundamente contrapuestos, mientras el país se encuentra inmerso en un clima de militarización extrema, decretos de última hora y un invierno severo que afecta casi todas las provincias. Los votantes, convocados a las urnas en medio de estas complejas circunstancias, elegirán entre Luisa González, candidata del movimiento Revolución Ciudadana (RC), y Daniel Noboa, de Acción Democrática Nacional (ADN).
El proceso electoral, que convoca a 13 millones de electores, incluidos aquellos fuera del país, iniciará a las 7:00 y culminará a las 17:00 horas. La obligación de votar incluye también a policías y militares. Según el Consejo Nacional Electoral (CNE), los resultados oficiales se darán a conocer después de las 21:00 horas.
El proceso ha estado marcado por varias controversias. En su última jornada de campaña, Noboa fue señalado por no solicitar licencia para realizar su proselitismo y por designar a una vicepresidenta sin tener facultades para ello, argumentando que no existían impedimentos legales según la Corte Constitucional, aunque dicha entidad aún no se ha pronunciado. Además, su participación directa como presidente en funciones ha generado críticas y ha llamado la atención de los observadores internacionales, que han destacado la participación activa de ministros y funcionarios públicos en la campaña a favor de Noboa, lo que ha sido visto como una clara ventaja para el oficialismo.
Por otro lado, las denuncias de manipulación del proceso electoral por parte del movimiento ADN también han sido una constante. Se han reportado casos de movilización de funcionarios del gobierno, distribución de bienes, alimentos y otros recursos en favor del candidato oficialista, lo que ha generado alarma entre los delegados internacionales. Un observador español, quien prefirió mantener su identidad en reserva, expresó su preocupación por la ventaja competitiva que Noboa ha tenido al no tomar licencia para hacer campaña, así como por la publicidad estatal excesiva en favor de su candidatura.
A pesar de las adversidades, Luisa González, quien lidera en las encuestas previas al balotaje, ha recibido el apoyo de importantes fuerzas políticas como Pachakutik, el Partido Socialista, Centro Democrático, y organizaciones gremiales e indígenas, especialmente en las zonas donde Noboa tuvo un apoyo notable en la primera vuelta.
González ha denunciado que su vida corre peligro, acusando a Noboa de tomar decisiones que comprometen su seguridad, como el cambio de su equipo de seguridad militar. “Responsabilizo a Daniel Noboa, al ministro de Defensa, Gian Carlo Loffredo, y al general Jaime Vela por cualquier atentado contra mi seguridad, la de mi familia o mi vida”, expresó la candidata. Este dramático mensaje ha sacudido el ambiente político del país, mientras la tensión por los comicios alcanza niveles críticos.
A las denuncias de inseguridad personal de González se suman las graves acusaciones de la viuda del candidato asesinado Fernando Villavicencio, quien señaló la complicidad de la Fiscal General de Ecuador, Diana Salazar, y del presidente Daniel Noboa en el encubrimiento del asesinato de su esposo. En un video divulgado en redes sociales, Verónica Sarauz acusó a Salazar y Noboa de bloquear la investigación del magnicidio, apuntando a una posible implicación de altos mandos de la Policía Nacional y actores del narcotráfico, lo que ha provocado un escándalo en el país.
Con un clima político cada vez más polarizado y una creciente preocupación internacional por la transparencia y seguridad del proceso electoral, Ecuador se prepara para un domingo de elecciones que promete ser decisivo no solo para su futuro político, sino también para la estabilidad del país en un contexto de incertidumbre y crisis.