Ataque aéreo israelí en el norte de Gaza deja al menos 20 muertos, según autoridades palestinas
Un ataque aéreo llevado a cabo por las fuerzas armadas de Israel en el norte de la Franja de Gaza causó la muerte de al menos 20 personas, de acuerdo con reportes de funcionarios palestinos. El bombardeo se centró en la ciudad de Gaza y zonas cercanas, en lo que se describe como una operación dirigida contra presuntos militantes armados. Sin embargo, varios de los fallecidos serían civiles, incluyendo mujeres y niños.
El ataque se produjo durante la madrugada y fue parte de una serie de ofensivas que Israel ha lanzado en los últimos días como respuesta a continuos lanzamientos de proyectiles desde Gaza hacia el sur de su territorio. Las Fuerzas de Defensa de Israel informaron que el objetivo del operativo era neutralizar centros de mando y estructuras utilizadas por grupos armados para planear ataques.
Vecinos del lugar relataron escenas de pánico y caos tras el impacto de los misiles. Varios edificios residenciales resultaron dañados o completamente destruidos, y numerosos heridos fueron trasladados a hospitales locales, muchos de los cuales ya operan en condiciones extremadamente limitadas debido al prolongado bloqueo impuesto sobre la Franja.
Las autoridades palestinas denunciaron el ataque como una masacre y acusaron a Israel de emplear fuerza desproporcionada en áreas densamente pobladas. Por su parte, el gobierno israelí afirmó que se toman medidas para minimizar daños a civiles, pero sostuvo que las organizaciones armadas que operan desde Gaza utilizan a la población como escudos humanos, complicando las operaciones militares.
La situación humanitaria en Gaza sigue deteriorándose rápidamente. Con un sistema de salud debilitado, cortes de electricidad constantes y escasez de alimentos y medicinas, la población enfrenta una crisis aguda. Organismos internacionales han expresado su alarma por el aumento de víctimas civiles y han llamado a un cese inmediato de hostilidades.
Mientras tanto, las tensiones entre ambas partes se mantienen en niveles muy altos, y se teme que una nueva escalada militar de gran magnitud pueda estallar si no se logra una contención rápida del conflicto.