Tailandia y Camboya Alcanzan un Alto el Fuego Incondicional Tras Cinco Días de Violentos Enfrentamientos Fronterizos
Tras cinco días de intensos y mortales enfrentamientos fronterizos, Tailandia y Camboya han acordado un alto el fuego “incondicional” a partir de la medianoche de este lunes, poniendo fin a una crisis que ha dejado al menos 35 muertos y desplazado a más de 260.000 personas en ambas naciones. La noticia fue anunciada por el primer ministro de Malasia, Anwar Ibrahim, quien presidió las conversaciones de paz en Kuala Lumpur.
El acuerdo fue alcanzado entre el primer ministro camboyano, Hun Manet, y el primer ministro interino tailandés, Phumtham Wechayachai, quienes, tras una breve conferencia de prensa, se estrecharon la mano en señal de reconciliación. Este avance pone fin a varios días de violencia que se desató el jueves, luego de una explosión de mina terrestre a lo largo de la frontera que dejó a cinco soldados tailandeses heridos. Ambos países se culparon mutuamente por iniciar los enfrentamientos, los cuales rápidamente escalaron.
“Este es un primer paso vital hacia la desescalada y la restauración de la paz y la seguridad en la región”, dijo Anwar Ibrahim, quien también destacó que la intervención de actores internacionales, como Estados Unidos y China, jugó un papel importante en facilitar el diálogo entre las partes.
Tensiones y Diplomacia Internacional
El acuerdo llega en un momento de gran presión diplomática. Los Estados Unidos, a través de su presidente Donald Trump, habían advertido que el prolongamiento de las hostilidades podría poner en peligro futuros acuerdos comerciales con ambos países. La Casa Blanca emitió un comunicado elogiando el acuerdo, con la secretaria de prensa Karoline Leavitt calificando la intervención de Trump como crucial para alcanzar el alto el fuego, incluso sugiriendo que “el Premio Nobel de la Paz” debería ser otorgado al mandatario estadounidense.
Además de la participación de Estados Unidos, China también desempeñó un papel importante en las negociaciones, con sus embajadores presentes en las conversaciones en Malasia. Anwar Ibrahim, como presidente del bloque ASEAN, destacó el apoyo internacional como un factor esencial para el éxito de las negociaciones.
Un Alto el Fuego con Condiciones Específicas
De acuerdo con el acuerdo, los comandantes militares de ambos países comenzarán a sostener conversaciones el martes para abordar medidas de reducción de tensiones. Camboya organizará una reunión de la comisión fronteriza el próximo 4 de agosto. Asimismo, los ministros de Relaciones Exteriores y Defensa de Tailandia, Camboya y Malasia trabajarán en la creación de un “mecanismo detallado” para monitorear y garantizar la implementación del alto el fuego, con miras a establecer una paz sostenida.
Hun Manet, el primer ministro camboyano, expresó su esperanza de que las relaciones bilaterales entre ambos países puedan volver a la normalidad rápidamente, permitiendo el regreso seguro de los 300.000 evacuados que han huido de las áreas afectadas. “Es hora de reconstruir la confianza y la cooperación entre nuestras naciones”, subrayó.
Reacciones de los Evacuados
La noticia del alto el fuego fue recibida con alivio y esperanza por los evacuados de ambos lados de la frontera. En un abarrotado refugio en Surin, Tailandia, Usa Dasri, una vendedora y agricultora tailandesa, expresó su alivio, diciendo: “Estoy feliz por esto, y me siento un poco aliviada. Extrañamos nuestro hogar. Hay muchas pequeñas cosas que me preocupan, el ganado y los campos de arroz. No sé qué podría haberles pasado. Quiero ir a casa, así que estoy feliz. También pienso en nuestros soldados en el frente, espero que estén a salvo”.
Por su parte, Chhuot Nhav, una evacuada camboyana de 42 años, expresó cautela a pesar de la noticia positiva: “Estoy feliz porque puedo regresar a casa y cuidar de mis animales, pero esperaré hasta que los enfrentamientos realmente se detengan antes de regresar”. Otros, como Kong Sin, un agricultor camboyano, aseguraron que si el alto el fuego se cumple como se ha prometido, volverían a sus hogares el martes mismo.
Un Conflicto de Larga Data
La frontera de 800 kilómetros entre Tailandia y Camboya ha sido un punto de disputa durante varias décadas, aunque los enfrentamientos armados han sido en su mayoría esporádicos y de corta duración. Las tensiones más recientes surgieron en mayo, cuando un soldado camboyano fue asesinado en un incidente fronterizo, lo que desató una ruptura diplomática entre ambos países y agravó la situación interna en Tailandia.
A pesar de la importancia de este acuerdo de alto el fuego, la situación sigue siendo volátil, y la comunidad internacional continuará observando de cerca los esfuerzos de ambas naciones para garantizar que la paz sea sostenible y duradera en la región.