El Mazatlán FC ha confirmado la sorpresiva renuncia del director técnico uruguayo, Robert Dante Siboldi, a su cargo al frente del primer equipo. La decisión, anunciada oficialmente por el club sinaloense, llega en un momento de profunda incertidumbre institucional y deportiva para los “Cañoneros” y marca el final de una breve gestión que comenzó en mayo de 2025.
Falta de Garantías Deportivas y Venta del Club
Aunque el comunicado oficial del Mazatlán FC menciona que Siboldi finaliza su relación laboral por así convenir a sus intereses, diversos reportes periodísticos apuntan a que la renuncia del estratega está directamente ligada al incierto futuro del club y a la falta de garantías deportivas rumbo al Clausura 2026.
El detonante principal es la confirmación de que la institución se encuentra en un avanzado proceso de venta de su franquicia al Atlante, un movimiento que facilitaría el regreso de los Potros de Hierro a la Liga MX a partir de mediados de 2026. Esta transición, que dejaría al Mazatlán sin inversión significativa para reforzarse y con una plantilla en desmantelamiento (como la reciente salida del delantero Nicolás Benedetti), fue considerada por Siboldi como un escenario inviable para competir.
Un Semestre Complicado y un Nuevo Rumbo
Siboldi, quien asumió la dirección técnica para el Apertura 2025, no logró clasificar al equipo ni siquiera al Play-in, terminando el torneo en la decimosexta posición de la tabla general con solo 14 puntos (dos triunfos, ocho empates y siete derrotas). Ante la inminente mudanza y la ausencia de un proyecto deportivo sólido a futuro, el técnico optó por abandonar el cargo, seguido por su cuerpo técnico.
El Mazatlán FC informó que, tras la salida del uruguayo, el Profesor Christian Ramírez, quien se desempeñaba como director de fuerzas básicas, asumirá la Dirección Técnica del primer equipo. Ramírez tomará las riendas en lo que se perfila como el último torneo del club en el máximo circuito.
La renuncia de Siboldi no solo deja un hueco en el banquillo, sino que es una señal clara del desmoronamiento del proyecto de Mazatlán, un equipo fundado apenas en 2020.




