Los Atlanta Falcons protagonizaron una de las mayores sorpresas de la penúltima semana de la NFL al derrotar 27-24 a Los Angeles Rams en un encuentro que mantuvo a los aficionados al borde de sus asientos en el Mercedes-Benz Stadium. El equipo local, que ya no cuenta con posibilidades de playoffs, asumió el rol de verdugo ante unos Rams que llegaban como favoritos y con la mira puesta en mejorar su posición de cara a la postemporada. La victoria de Atlanta se selló en los instantes finales gracias a un gol de campo de 51 yardas convertido por el pateador Zane Gonzalez con apenas 21 segundos en el reloj, rompiendo un empate que los angelinos habían conseguido tras una remontada histórica.
El dominio de los Falcons fue absoluto durante la primera mitad, logrando una ventaja que parecía definitiva de 21-0 antes de irse al descanso. La ofensiva comandada por Kirk Cousins encontró en Bijan Robinson a su motor principal, quien no solo anotó por aire, sino que también firmó una espectacular carrera de 93 yardas para touchdown, estableciendo un nuevo récord para la franquicia. Por su parte, la defensiva de Atlanta castigó severamente al mariscal Matthew Stafford, interceptándolo en tres ocasiones, incluyendo un “pick-six” de 34 yardas por parte del veterano Jessie Bates III que silenció temporalmente las aspiraciones de los visitantes.
Sin embargo, los Rams demostraron por qué son contendientes en la Conferencia Nacional al borrar una desventaja de 21 puntos durante el segundo medio. Matthew Stafford se sacudió los errores iniciales y guio una reacción ofensiva que incluyó pases de anotación a Terrance Ferguson y Puka Nacua, este último para empatar el marcador 24-24 con poco menos de tres minutos restantes. La defensa de Los Ángeles también aportó a la causa con una jugada de antología cuando Jared Verse bloqueó un intento de gol de campo y devolvió el ovoide 76 yardas hasta las diagonales, inyectando una dosis de dramatismo que cambió por completo la inercia del partido.
A pesar del colapso parcial, Atlanta supo mantener la calma en la serie final para dejar el destino del juego en la pierna de Gonzalez, cuya patada certera sentenció el resultado y propinó a los Rams su segunda derrota consecutiva. Este descalabro complica el panorama de Los Ángeles en la siembra de la NFC, enviándolos momentáneamente al sexto puesto y dejándolos vulnerables para la última semana de la temporada regular. Mientras tanto, los Falcons celebran su tercera victoria al hilo, demostrando que bajo el mando de Raheem Morris el equipo ha encontrado una identidad competitiva que promete dar de qué hablar el próximo año.




