EE.UU. descarta redadas migratorias durante el Super Bowl LX en California
La Casa Blanca informó este viernes que no tiene planes por el momento de llevar a cabo redadas migratorias durante el Super Bowl LX, que se celebrará el 8 de febrero de 2026 en Santa Clara, California, y cuyo espectáculo de medio tiempo estará encabezado por Bad Bunny.
“Hasta donde sé, no hay un plan tangible para eso en este momento”, declaró la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, durante una rueda de prensa. Sin embargo, enfatizó que la administración de Donald Trump continuará deteniendo y deportando a migrantes indocumentados si se les encuentra.
La elección del astro puertorriqueño para el show de medio tiempo ha generado críticas entre seguidores del expresidente Trump. La portavoz evitó pronunciarse sobre la polémica: “Sé que hay muchos en esta sala que están ansiosos por escuchar la respuesta del presidente sobre Bad Bunny, así que no me adelantaré a él”, dijo.
Críticas desde el Departamento de Seguridad Nacional
El pasado miércoles, Corey Lewandowski, asesor del Departamento de Seguridad Nacional, sugirió que agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) podrían desplegarse en los alrededores del estadio, alegando que “no hay ningún lugar donde se pueda brindar refugio a quienes se encuentran en este país ilegalmente”.
Lewandowski también criticó la participación de Bad Bunny en el evento: “Es una vergüenza que hayan elegido a alguien que parece odiar tanto a Estados Unidos para representarlos en el descanso del partido”.
Bad Bunny y su defensa de la comunidad latina
El cantante puertorriqueño ha sido crítico de las políticas migratorias de Trump, ha usado su música para respaldar a la comunidad latina y apoyó en las elecciones presidenciales pasadas a la candidata demócrata Kamala Harris. En su última gira mundial, ‘Debí tirar más fotos’, Bad Bunny excluyó a Estados Unidos para evitar riesgos de redadas migratorias en sus conciertos.
Con esta actuación, Bad Bunny se convertirá en el primer artista latino en presentarse en solitario en un espectáculo de medio tiempo del Super Bowl, marcando un hito histórico en el evento más visto del fútbol americano profesional.