Bajo la línea de la administración de Donald Trump, el Departamento de Estado de EE. UU. instruyó a sus embajadas en Latinoamérica informar sobre los delitos derivados de la “migración masiva”.
La medida busca que las sedes diplomáticas identifiquen políticas locales que “faciliten” el flujo migratorio o prioricen a extranjeros sobre ciudadanos. Según el comunicado oficial, el objetivo es presionar a los gobiernos de la región para que refuercen sus fronteras frente a las redes criminales que, según Washington, “causaron estragos” en territorio estadounidense.
Este endurecimiento se suma a un balance de cierre de año que registra 605,000 deportaciones y la salida voluntaria de 1.9 millones de personas durante 2025.
También te puede interesar: https://fm105.com.mx/comando-sur-de-ee-uu-hunde-otra-lancha/
