El Real Madrid, con su rica historia de títulos en la Champions, no falló en su debut y logró una victoria convincente.

A pesar de las nuevas dinámicas del torneo y la creciente competencia de clubes emergentes, los ‘viejos reyes’ como el Madrid, Bayern Múnich, y otros clubes con un legado importante en el fútbol europeo, mostraron que su experiencia y calidad siguen siendo factores clave en su éxito.

El Real Madrid comenzó su nueva campaña en la Champions League con una sólida victoria 3-1 sobre el Stuttgart en el Santiago Bernabéu, confirmando su dominio en la competición tras haber levantado el trofeo el año pasado en Wembley contra el Borussia Dortmund. Aunque el equipo alemán presentó más resistencia de lo previsto, especialmente en la segunda mitad, el conjunto merengue supo imponerse gracias a su experiencia y talento individual.

Este encuentro también marcó el debut europeo de Kylian Mbappé con la camiseta del Real Madrid. El delantero francés, recientemente incorporado como el nuevo ídolo del club, no tardó en dejar su huella, abriendo el marcador al inicio del segundo tiempo (46′). Sin embargo, el Stuttgart respondió con un gol de Deniz Undav en el minuto 68, complicando el partido para los locales.

A pesar del empate, el Madrid no se dejó intimidar y volvió a tomar la delantera con un cabezazo de Antonio Rüdiger en el minuto 83, haciendo valer su pasado en el Stuttgart y sellando la ventaja para el equipo español. Para poner el broche de oro, el joven brasileño Endrick, una de las promesas más emocionantes del club, anotó en la última jugada del partido (90+5), asegurando los tres puntos para el equipo en su estreno en la renovada Champions League.

El arquero belga Thibaut Courtois también fue crucial, con varias intervenciones clave que impidieron que el Stuttgart lograra más goles. Con esta victoria, el Madrid reafirma su papel como uno de los favoritos en la competición que ha dominado históricamente, y con figuras como Mbappé y Endrick, parece listo para seguir haciendo historia en Europa.