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Emboscada en Frontera Comalapa deja cinco policías muertos

La Fiscalía General del Estado (FGE) de Chiapas investiga el asesinato de cinco agentes de la Secretaría de Seguridad del Pueblo, quienes fueron emboscados en el Ejido Las Champas, en el municipio de Frontera Comalapa, cerca de la frontera con Guatemala.

Las víctimas, identificadas como Guillermo “N”, Jesús “N”, Joel “N”, Brenda “N” (única mujer del grupo) y Pedro “N”, realizaban un recorrido de vigilancia a bordo de una unidad oficial de la Policía Estatal Preventiva cuando fueron atacados por un grupo armado en el camino que conduce al ejido Sabinalito, confirmó la FGE en un comunicado.

Durante las primeras diligencias en el lugar, las autoridades localizaron aproximadamente 700 cartuchos percutidos de distintos calibres, lo que evidencia la violencia y letalidad del ataque.

El fiscal estatal, Jorge Luis Llaven Abarca, informó que un grupo especializado en homicidios encabeza la investigación. Asimismo, se realizan pruebas periciales para la identificación formal de los cuerpos y su posterior entrega a las familias.

“Desde los primeros momentos se coordinó un operativo contundente en la región. Refrendo nuestro compromiso con el pueblo de Chiapas: estos arteros crímenes no quedarán impunes”, declaró Llaven Abarca.

Por su parte, el gobernador de Chiapas, Eduardo Ramírez Aguilar, condenó el ataque a través de un mensaje en redes sociales y aseguró que habrá una respuesta clara y con aplicación irrestricta de la ley. “Les afirmo que el gobierno responderá de forma contundente”, señaló.

Este hecho se suma a una escalada de violencia atribuida a grupos del crimen organizado que operan en la región fronteriza con Guatemala, donde recientemente se han reportado desplazamientos forzados, bloqueos carreteros y ataques armados.

Ante la situación, la Secretaría de Seguridad del Pueblo anunció el despliegue de mil agentes adicionales en la zona para reforzar la seguridad. “La presencia de las fuerzas de seguridad será fuerte y decidida. No permitiremos que la delincuencia organizada arrebate la tranquilidad de las comunidades”, indicó la dependencia estatal.

El caso ha generado preocupación entre organizaciones civiles y habitantes de la región, quienes han exigido mayores garantías de seguridad y justicia para los agentes caídos.