En 18 años, 1,600 mujeres se han registrado asesinadas en Oaxaca

La organización destacó que en la región del Istmo de Tehuantepec, la demanda del servicio de protección y salvaguarda de la vida de las mujeres ha aumentado en los últimos años.

En el marco del Día Internacional de la Mujer y de los 20 años de fundación, la Red Interinstitucional para la Prevención y Atención a Casos de Violencia Familiar y Sexual en el Istmo de Tehuantepec informó que en los últimos 18 años, 1,600 mujeres han sido asesinadas en Oaxaca.

La Red Interinstitucional, conformada por una veintena de colectivas, organizaciones e instituciones publicas y comunitarias como el Grupo de Mujeres 8 de Marzo, Mexfam, Guendaracane, Ddseer, entre otras, destacó, que en el año 2020, marcado por la pandemia, se agudizó la violencia de genero de manera alarmante.

De acuerdo con cifras oficiales del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), hasta noviembre de 2020, 232 mujeres perdieron la vida de forma violenta en Oaxaca.

“Las mujeres, con mayor frecuencia, son víctimas de asesinatos en entornos domésticos, incluyendo a niñas y adultas mayores. Estos crímenes se cometen con extrema violencia, saña, y con el uso de fuerza y violencia corporal, convirtiendo el hogar en un sitio de alto riesgo para ellas”, informaron en conferencia de prensa.

Las feministas, activistas y defensoras destacaron que el 2021 registró más de 100 feminicidios en el estado, seguido por más de 144 en 2022, 123 en 2023, y en lo que va del 2024 ya suman cuatro feminicidios en el primer mes del 2024 en el Istmo de Tehuantepec, ubicándola como una de las zonas más peligrosas para las mujeres.

“Estos elevados índices de violencia reflejan una grave situación que lamentablemente está siendo olvidada por las autoridades locales y estatales”, reafirmaron las mujeres.
Destacaron que en la región del Istmo de Tehuantepec, la demanda del servicio de protección y salvaguarda de la vida de las mujeres ha aumentado en los últimos años.

En el año 2020, durante la pandemia, se evidenció un incremento en todas las modalidades de violencia, siendo más cruel en casos donde las mujeres fueron rociadas con ácido y gasolina, torturadas, asesinadas con armas de fuego y armas blancas, causando un sufrimiento prolongado y agonía.

“Este aumento del 90% en la saña y la violencia contra las mujeres, hijas e hijos no tiene precedentes”, agregaron.