Internacional

Entran en vigor aranceles de EE.UU. al acero y aluminio; Canadá, el más afectado

A partir de este miércoles, entraron en vigor los aranceles del 25 % sobre las importaciones de acero y aluminio a Estados Unidos, una medida que impacta directamente a varios países proveedores, pero especialmente a Canadá, el principal exportador de estos metales a territorio estadounidense.

Medida en medio de tensiones comerciales
La decisión fue anunciada en febrero por el presidente Donald Trump, quien ha justificado la imposición de aranceles como parte de su estrategia para reducir déficits comerciales y fortalecer la industria nacional. Sin embargo, en las últimas horas, la medida se ha visto envuelta en una escalada de tensiones con Ontario, Canadá, debido al aumento del costo de la electricidad que esa provincia impuso a EE.UU.

El martes, Trump dobló la tasa arancelaria para Canadá al 50 %, en respuesta a la subida del 25 % en el precio de la electricidad impuesta por Ontario a clientes estadounidenses.

El jefe de Gobierno de Ontario, Doug Ford, reaccionó suspendiendo temporalmente el alza en las tarifas eléctricas para los estados de Michigan, Minnesota y Nueva York, y anunció una reunión con el secretario de Comercio de EE.UU., Howard Lutnick, este jueves en Washington para retomar el diálogo.

Trump abre la posibilidad de reconsiderar los aranceles
Poco después, Trump sugirió que podría revisar la medida en respuesta a la decisión de Ford:

“Había un señor muy fuerte en Canadá que dijo que iba a imponer impuestos y costes a la electricidad de Estados Unidos, y hemos sido informados hace poco que no lo va a hacer”, señaló el mandatario.

A pesar de esto, los mercados reaccionaron con incertidumbre. Wall Street cerró a la baja por segundo día consecutivo, reflejando la preocupación de inversionistas sobre el impacto económico de los aranceles y el riesgo de una recesión en EE.UU.

Impacto en el comercio global
Los nuevos aranceles afectan principalmente a Brasil, México, Corea del Sur y Vietnam en el sector del acero, y a Emiratos Árabes Unidos, Rusia y China en el caso del aluminio.

Mientras tanto, la comunidad empresarial y analistas económicos intentan descifrar si esta ofensiva arancelaria de Trump responde a una estrategia de largo plazo o es simplemente una herramienta de presión momentánea, como ocurrió durante su primer mandato (2017-2021).

“La gran victoria no es el arancel, que es una gran victoria porque supone mucho dinero; la gran victoria es si (las empresas) se mudan a nuestro país”, declaró Trump ante un grupo de empresarios, reforzando su postura de atraer inversiones manufactureras a EE.UU.

Desde su regreso a la Casa Blanca, el republicano ha utilizado los aranceles como mecanismo de presión en diferentes frentes, incluyendo sus exigencias a México, Canadá y China para frenar el flujo de fentanilo que ingresa a Estados Unidos.