Faith Kipyegon busca la milla histórica
El mundo del tenis recibió esta semana una noticia impactante: Novak Djokovic, el legendario tenista serbio y uno de los máximos ganadores de Grand Slams en la historia, fue operado del menisco derecho tras una lesión sufrida durante los cuartos de final de Roland Garros. Como resultado, se confirmó que no participará en el torneo de Wimbledon 2025, una de sus citas predilectas.
Djokovic, de 38 años, se vio obligado a retirarse del Abierto de Francia tras sentir un fuerte dolor en la rodilla durante su duelo contra el argentino Francisco Cerúndolo. Aunque intentó continuar el partido, el malestar persistente y las limitaciones físicas lo forzaron a abandonar el torneo, a pesar de haber ganado en cinco sets su último encuentro.
Días después, los estudios médicos revelaron una rotura parcial en el menisco, lo que llevó al equipo del tenista a tomar la decisión de someterse a una intervención quirúrgica inmediata en París. El propio Djokovic confirmó la noticia a través de sus redes sociales, donde publicó una fotografía tras la operación, junto a un mensaje positivo:
“Acabo de salir de una cirugía exitosa. Estoy agradecido al equipo médico y a todos los que me han enviado su apoyo. Empezamos la recuperación paso a paso. Nos vemos pronto.”
Aunque el procedimiento fue mínimamente invasivo y exitoso, el tiempo estimado de recuperación le impedirá disputar Wimbledon, torneo que ha ganado en siete ocasiones. Su baja supone un duro golpe tanto para el evento como para sus seguidores, quienes esperaban verlo en la Catedral del tenis una vez más.
Más allá de Wimbledon, la gran incógnita ahora gira en torno a su participación en los Juegos Olímpicos de París 2025, que se disputarán sobre polvo de ladrillo en el mismo complejo de Roland Garros. Djokovic ha manifestado en varias ocasiones que ganar el oro olímpico es uno de sus grandes objetivos pendientes, especialmente en lo que podría ser su última aparición olímpica.
La Federación Serbia de Tenis mostró su apoyo al jugador, asegurando que respetarán sus tiempos de recuperación y que priorizarán su salud a largo plazo. “Es un campeón. Ha superado obstáculos enormes en su carrera, y sabemos que volverá a competir al máximo nivel”, señaló su entrenador Goran Ivanišević.
En una temporada que ya ha tenido sorpresas como la irrupción de jóvenes talentos como Jannik Sinner y Carlos Alcaraz en lo más alto del ranking la ausencia de Djokovic abre el panorama de Wimbledon y del circuito en general. Aunque la leyenda serbia aún no ha hablado de retiro, las lesiones comienzan a ser un factor más presente en esta etapa final de su carrera.
Por ahora, el mundo del tenis espera su recuperación. Porque aunque los años pasen, Novak Djokovic sigue siendo sinónimo de excelencia, lucha y legado.