Geopolítica, en el centro de la arremetida de Trump contra el Canal de Panamá
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha generado tensiones internacionales al sugerir que el Canal de Panamá debería ser “devuelto” a su país, argumentando una “estafa” en las tarifas y acusando la injerencia de China en la emblemática vía interoceánica. Estas declaraciones surgen en un contexto de crecientes tensiones comerciales y geopolíticas con China, y en vísperas del 25 aniversario de la transferencia del canal a Panamá.
Contexto histórico y geopolítico
Estados Unidos es el principal usuario del Canal de Panamá, una obra que construyó y administró hasta su traspaso a Panamá el 31 de diciembre de 1999, bajo los Tratados Torrijos-Carter de 1977. Sin embargo, las recientes declaraciones de Trump apuntan a presionar a Panamá para que alinee su política con los intereses estadounidenses, según analistas.
“Trump está enviando un mensaje claro a América Latina: tienen que alinearse con nosotros en esta inevitable guerra comercial con China”, explicó el economista Carlos Araúz.
El economista Eddie Tapiero añadió que Trump utiliza un enfoque pragmático para negociar, en el cual el canal, administrado de forma independiente por la Autoridad del Canal de Panamá, se convierte en una ficha estratégica en el tablero geopolítico.
Respuesta panameña y los peajes del canal
El presidente panameño, José Raúl Mulino, reafirmó la soberanía del país sobre el canal y desestimó las acusaciones de Trump sobre las tarifas. “El canal de Panamá y sus zonas adyacentes son de Panamá y lo seguirán siendo. Las tarifas no son caprichosas; se establecen en audiencias abiertas considerando las condiciones del mercado”, señaló.
Los peajes del canal, que financian su operación y modernización, son aprobados por una junta de gobernadores donde Estados Unidos tiene representación. “No hay margen para la intervención unilateral en este tema”, aseguró Araúz, resaltando que la política proteccionista de Trump podría encarecer los costos de vida en Estados Unidos.
Migración y tensiones adicionales
Panamá es un punto clave para miles de migrantes que buscan llegar a Estados Unidos, una situación que Trump ya intentó abordar durante su primer mandato, proponiendo que Panamá sirviera como centro de retención, algo que el país rechazó.
Según Tapiero, la migración podría convertirse en un elemento de negociación entre ambos países. Sin embargo, Araúz advirtió que una solución unilateral está destinada al fracaso, enfatizando la necesidad de un enfoque coordinado.
Entre la diplomacia y la confrontación
La controversia ocurre pocos días después de la conmemoración del 35 aniversario de la invasión estadounidense a Panamá en 1989, un evento que dejó heridas abiertas en la memoria histórica del país.
Con su segundo mandato programado para iniciar el 20 de enero, Trump parece dispuesto a fortalecer su política proteccionista y a utilizar el canal como símbolo de sus prioridades estratégicas. Panamá, por su parte, enfrenta el desafío de defender su soberanía mientras busca mantener relaciones diplomáticas estables con Estados Unidos en medio de este panorama turbulento.
