HRW denuncia crímenes de guerra en ataques israelíes contra infraestructuras civiles en Líbano
La organización Human Rights Watch (HRW) acusó este miércoles al Ejército de Israel de cometer crímenes de guerra al llevar a cabo ataques deliberados contra edificios vinculados a la Asociación Al Qadr al Hasán, considerada el ala financiera de Hezbolá, en varias zonas de Líbano. Según la ONG, estas infraestructuras civiles no representan objetivos militares legítimos, lo que convierte los ataques en violaciones de las leyes de la guerra.
“Los repetidos ataques del ejército israelí contra instituciones financieras libanesas indican un ataque deliberado e ilegal contra el ala civil de Hezbolá”, señaló Ramzi Kais, investigador sobre Líbano de HRW. “Designar a una institución civil como objetivo militar debido a su afiliación, en lugar de por su contribución efectiva a la acción militar, pone en riesgo todas las operaciones comerciales en tiempos de guerra”, añadió.
Las declaraciones de HRW surgieron tras los ataques israelíes entre la noche del domingo y el lunes, que afectaron a una treintena de oficinas de la Asociación Al Qadr al Hasán en el sur de Beirut y en otras zonas del país. La ONG destacó que estas asociaciones proporcionan servicios vitales a cientos de miles de personas, y que atacar sus infraestructuras no solo viola las leyes de guerra, sino que también pone en peligro a la población que depende de ellas para su sustento.
Desde la crisis económica de Líbano en 2019, un creciente número de libaneses ha recurrido a esta asociación, sancionada por Estados Unidos en 2007 por presuntamente gestionar las finanzas de Hezbolá. Israel ha argumentado que el grupo está involucrado en la financiación de actividades, pero no ha presentado evidencia de que esté directamente relacionado con el conflicto armado en curso.
HRW subrayó que el uso de una institución financiera o asociación por parte de un grupo armado no convierte automáticamente a esa entidad en un objetivo militar legítimo, según las leyes de la guerra. En este contexto, la ONG instó a los aliados de Israel a suspender la venta de armas y la ayuda militar al gobierno de Benjamin Netanyahu, debido a las violaciones graves de los derechos humanos que han resultado de estas acciones.
Los ataques israelíes forman parte de una ofensiva más amplia en la región, mientras las tensiones continúan escalando.