La Federación Internacional de Fútbol Asociación ha respondido de manera oficial ante la creciente preocupación de los aficionados por el elevado costo de las entradas para la próxima Copa del Mundo. Con el objetivo de garantizar que los estadios en México, Estados Unidos y Canadá no pierdan la esencia de las aficiones locales y viajeras, el organismo ha introducido una nueva categoría denominada Supporter Entry Tier. Esta modalidad busca facilitar el acceso a quienes siguen fielmente a sus selecciones nacionales, estableciendo un precio fijo que rompe con la tendencia de las tarifas dinámicas que habían elevado los costos a cifras astronómicas.
El anuncio confirma que estos boletos tendrán un precio único de 60 dólares estadounidenses para cualquiera de los 104 partidos del torneo, incluyendo el partido inaugural y la gran final. Este ajuste es especialmente significativo si se compara con los precios de las categorías estándar, que para la final en Nueva Jersey han llegado a superar los 4,000 dólares en las fases de venta iniciales. La medida intenta calmar el descontento de diversas agrupaciones de aficionados que habían calificado el sistema de precios anterior como prohibitivo para el fanático promedio.
A diferencia de la venta general, la distribución de estos boletos económicos estará bajo la responsabilidad de las federaciones de cada país clasificado. Cada asociación nacional recibirá un porcentaje del inventario total de los estadios donde juegue su equipo para asignarlo a sus grupos de seguidores oficiales. Bajo este esquema, el 10% de los boletos destinados a las aficiones nacionales se venderán al precio de 60 dólares, mientras que otro 40% se mantendrá en una categoría llamada Supporter Value Tier, que, aunque será más costosa que la básica, seguirá siendo más accesible que los paquetes de hospitalidad o las entradas de primera categoría.
Para poder acceder a estas entradas, los interesados deben estar registrados en el portal oficial de la FIFA y, preferiblemente, formar parte de los programas de lealtad de sus respectivas federaciones nacionales, como los clubes de abonados o grupos de apoyo reconocidos. Con más de 20 millones de solicitudes ya registradas en la fase actual de sorteo aleatorio, la competencia por estos asientos será intensa. Sin embargo, la creación de esta categoría representa un paso importante para devolverle al fútbol su carácter popular en el evento deportivo más grande del planeta.




