La Universidad de Columbia acepta los requisitos de Trump para mantener su financiación
La Universidad de Columbia ha aceptado una serie de condiciones impuestas por el gobierno de Donald Trump para recuperar los 400 millones de dólares en financiamiento federal que le fueron retirados a principios de mes por presunto antisemitismo en su campus.
Entre las nuevas medidas, la universidad prohibirá el uso de mascarillas quirúrgicas, requerirá que los estudiantes que participen en protestas se identifiquen con su carné universitario y ha contratado 36 agentes de seguridad con la facultad de expulsar o detener a alumnos si lo consideran necesario.
“Mientras entrenamos a nuestra fuerza de seguridad interna, continuaremos confiando en el Departamento de Policía de Nueva York para ofrecer seguridad adicional y asistencia cuando sea necesario”, informó la universidad en una carta oficial.
Presión del gobierno y cambios en el campus
La administración Trump retiró la financiación de Columbia a principios de marzo, argumentando que la universidad había sido “pasiva ante el persistente acoso a estudiantes judíos”. Tras negociaciones, la Casa Blanca estableció una serie de requisitos para restablecer el apoyo financiero, que el centro educativo ha decidido aceptar.
“Hemos trabajado muy duro para abordar las preocupaciones legítimas sobre la discriminación, el acoso y los actos antisemitas que nuestra comunidad judía ha enfrentado desde el 7 de octubre de 2023”, señaló la universidad.
Además de los cambios en seguridad, Columbia creará un nuevo vicerrectorado para supervisar programas educativos relacionados con Oriente Medio, como el Centro para los Estudios Palestinos y el Instituto por Israel y los Estudios Judíos, así como otros programas sobre África y Asia.
Un campus bajo vigilancia
Columbia fue uno de los principales escenarios de protestas propalestinas en Estados Unidos el año pasado, manifestaciones que se extendieron a otras universidades y provocaron expulsiones y arrestos de estudiantes.
Uno de los casos más mediáticos es el de Mahmoud Khalil, líder estudiantil detenido en un centro de inmigrantes en Luisiana y cuya deportación ha sido solicitada por el gobierno de Trump, bajo la acusación de supuestos vínculos con Hamás, aunque sin pruebas confirmadas hasta el momento.
Con estas nuevas medidas, Columbia busca garantizar la continuidad de su financiamiento federal, aunque el endurecimiento de sus políticas ha generado preocupación entre la comunidad estudiantil sobre la posible represión de la protesta y la libertad de expresión en el campus.