DestacadasGuaymas

Napreco abandona a vecinos de la privada Kiamy

La constructora Napreco, responsable de la obra del canal pluvial en la privada Kiamy, ha sido señalada por vecinos del sector por incumplir compromisos y dejar sin reparar los daños ocasionados en las viviendas durante los trabajos.


Los afectados denunciaron que la empresa ha terminado únicamente la construcción de aulas para la academia de inglés ubicada en la zona, mientras que el resto de la obra quedó en el abandono.
De acuerdo con los residentes, las afectaciones en las casas se han agravado con el paso de los meses.
“Es un desastre, ya es hora que no terminan de restaurar nada”, expresaron, al señalar que las tapas de drenajes permanecen rotas, no se instalaron tuberías para agua de manera adecuada y el área se encuentra convertida en un tiradero de agua y tierra, generando condiciones insalubres y riesgos estructurales.
Los colonos recordaron que desde el inicio de la obra se estableció un compromiso por parte de Napreco y de las autoridades para reparar los daños colaterales en las viviendas, pero hasta el momento no han recibido respuesta ni avances.


“Lo único que terminaron fueron las aulas de la academia de inglés y con eso dieron por cerrado el tema. A nosotros nos dejaron abandonados”, lamentaron.
Además, señalaron que el canal pluvial, que era la obra principal, tampoco presenta avances significativos.
La zona luce con trabajos inconclusos y con escombros que se han acumulado en los accesos, dificultando la movilidad y aumentando el riesgo de accidentes.
Los vecinos hicieron un llamado a la Secretaría de Infraestructura y Desarrollo Urbano para que supervise el cumplimiento de la empresa y exija que se atiendan las irregularidades.
“Ya Sidur se dedicó a terminar la academia y se olvidaron de nosotros, que vivimos todos los días con el problema en nuestras casas”, insistieron.
La comunidad de la privada Kiamy pide que se retomen los compromisos originales eye son concluir la obra del canal, restaurar las viviendas dañadas y atender la infraestructura básica, pues aseguran que el abandono representa un fraude a la confianza vecinal y un riesgo sanitario y de seguridad.
“Nos prometieron reparar todo lo que dañaran, pero al final lo único que hicieron fue una escuela que ni siquiera usamos, mientras nuestras casas están cada vez peor. Ojalá alguien nos escuche”, expresaron los afectados.
Hasta el momento, la constructora no ha emitido un pronunciamiento público ni se ha presentado a dialogar con los residentes, lo que mantiene el malestar y la incertidumbre en la zona.