Netanyahu y Trump cierran la puerta a negociaciones de alto el fuego en Gaza; crece la emergencia humanitaria
El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, y el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dieron este viernes señales claras de abandonar las negociaciones de alto el fuego con Hamás, al considerar que los militantes palestinos “no desean alcanzar un acuerdo”, según afirmaron públicamente.
Netanyahu aseguró que Israel ya analiza “opciones alternativas” para lograr la liberación de los rehenes que permanecen en Gaza y para terminar con el dominio de Hamás en el enclave, mientras Trump declaró que los líderes del grupo islamista palestino “serán perseguidos” a partir de ahora.
Ambas posturas parecen cerrar —al menos por ahora— las vías diplomáticas para una tregua, en un momento en el que la crisis humanitaria en Gaza se profundiza y se multiplican las advertencias internacionales sobre el riesgo inminente de hambruna masiva.
Señalamientos cruzados
El enviado estadounidense Steve Witkoff culpó a Hamás del fracaso de las negociaciones. En respuesta, Basem Naim, alto funcionario de Hamás, rechazó los señalamientos al calificarlos como “presiones en nombre de Israel” y sostuvo que las conversaciones fueron “constructivas”.
“Lo que hemos presentado […] creemos que podría conducir a un acuerdo si el enemigo tuviera la voluntad de alcanzarlo”, afirmó Naim en una publicación en redes sociales.
Según fuentes cercanas a las negociaciones, la última propuesta contemplaba un alto el fuego de 60 días, la liberación parcial de rehenes israelíes a cambio de prisioneros palestinos y la entrada de ayuda humanitaria adicional.
Emergencia alimentaria se agrava
En paralelo, el ejército israelí anunció que permitiría nuevos lanzamientos aéreos de ayuda a Gaza, sin embargo, Hamás calificó esta medida como “una acrobacia aérea”, y exigió la apertura urgente de corredores humanitarios terrestres sostenidos.
“La franja no necesita acrobacias aéreas, necesita un flujo constante de camiones de ayuda para salvar vidas”, dijo Ismail Al-Thawabta, portavoz del gobierno de Gaza.
Autoridades médicas del enclave informaron que nueve palestinos más murieron por desnutrición en las últimas 24 horas. La cifra de fallecidos por hambre o sus efectos colaterales asciende ya a decenas, mientras Naciones Unidas advirtió que se están agotando los suministros terapéuticos para niños en estado de desnutrición aguda severa.
Israel insiste en que ha permitido el ingreso de alimentos suficientes y acusa a la ONU de no distribuirlos correctamente. Por su parte, Naciones Unidas rechaza esa afirmación y asegura estar trabajando al límite bajo las restricciones impuestas por el ejército israelí.
Más ataques y muertes de civiles
Mientras tanto, las operaciones militares israelíes continúan. Este viernes, fuentes médicas palestinas reportaron al menos 21 muertos, entre ellos cinco personas que se refugiaban en una escuela en la ciudad de Gaza.
En otro ataque nocturno, murió el periodista Adam Abu Harbid, cuyo cuerpo fue trasladado en procesión con su chaleco marcado como “PRENSA” aún sobre él. Compañeros de medios denunciaron ataques sistemáticos contra reporteros.
“Nos quedaremos, continuaremos denunciando los crímenes de la ocupación israelí y sus ataques sistemáticos contra periodistas”, declaró Mahmoud Awadia, colega de Abu Harbid. Israel, por su parte, niega haber atacado intencionadamente a periodistas.