Nivel de presas de Sinaloa sigue en descenso

El nivel de las presas en Sinaloa continúa descendiendo y, este miércoles, se reportó un promedio general de 17.5 por ciento de su capacidad, situación que ha generado preocupación en diversas comunidades del estado, especialmente en Choix, donde se encuentra la presa más importante del estado, la Luis Donaldo Colosio, conocida como Huites. Actualmente, la presa se encuentra a solo 1.9 por ciento de su capacidad de almacenamiento, con 59.4 millones de metros cúbicos de agua, lo que ha afectado gravemente tanto a los pescadores como a los agricultores de la región.

Queja de la alcaldesa de Choix
La alcaldesa de Choix, Yoneida Gámez, expresó su descontento por el incumplimiento del gobierno estatal respecto a los apoyos extraordinarios prometidos para los pescadores de la zona, quienes se han visto seriamente afectados por la sequía. Gámez recordó que, hace dos meses, los pescadores se reunieron con autoridades municipales y de la Secretaría de Pesca del gobierno de Sinaloa, encabezado por el morenista Rubén Rocha Moya, quienes se comprometieron a brindarles ayuda, pero hasta la fecha no han recibido ninguna respuesta.

“Seguimos esperando el apoyo de la dependencia estatal; espero que estos primeros días del año haya una respuesta para los pescadores, quienes realmente padecen esta situación”, indicó Gámez, quien puntualizó que los pescadores cumplieron su parte al extraer el pez de las zonas donde aún queda agua en la presa Huites, y ahora espera que las autoridades también hagan lo propio.

Impacto en la pesca y la agricultura
El bajo nivel de la presa Huites ha provocado el colapso de las poblaciones de tilapias, que son una fuente importante de empleo en la región. Baltazar Valdez Armetia, miembro de la organización Campesinos Unidos de Sinaloa, señaló que los pescadores de Choix han quedado sin trabajo, y el impacto de la sequía en los distritos de riego es grave debido a que la Huites es la principal fuente de agua para la agricultura en la región.

El cultivo de maíz ha sido uno de los más afectados, ya que solo se ha sembrado el 25 por ciento de la superficie habitual. De las aproximadamente 540 mil hectáreas sembradas en ciclos anteriores, actualmente se han reportado poco más de 100 mil. Se estima que la producción de maíz se reducirá de 6 millones de toneladas en el ciclo 2022-2023 a alrededor de 1.2 millones de toneladas en el ciclo 2024-2025.

Por otro lado, el cultivo de frijol ha cobrado relevancia, con cerca de 100 mil hectáreas sembradas, aunque los productores temen que esta cosecha también pueda verse afectada por los bajos niveles de lluvia pronosticados para este año. Además, cultivos como el garbanzo, cártamo y algunas hortalizas, que son tradicionales de exportación, también enfrentan incertidumbre debido a las condiciones climáticas adversas.

Un panorama preocupante
Los pronósticos para este año indican que las lluvias serán escasas, lo que podría dejar a Sinaloa sin una parte importante de su producción agrícola durante el ciclo 2025-2026. En este escenario, solo algunas zonas de riego y las áreas con bombeo podrían salvar una pequeña parte de la cosecha.

Valdez Armetia alertó que la situación del campo sinaloense es crítica debido a una combinación de factores: las malas condiciones climáticas, las dificultades en los mercados, y la falta de políticas agrícolas adecuadas que, según él, han afectado a los sectores productivos de la zona, incluidos los sectores ganadero y pesquero. Además, en Sinaloa hay unas 300 mil hectáreas ociosas y otras 350 mil hectáreas sembradas, lo que muestra una disminución del 55 por ciento en la superficie destinada a la agricultura.

El panorama es desolador, y tanto productores como pescadores continúan esperando respuestas por parte de las autoridades estatales para mitigar los efectos de la sequía en Sinaloa.