ONU alerta sobre el “renacimiento” de las drogas psicodélicas en retiros espirituales
La ONU sobre el creciente uso de drogas psicodélicas para fines terapéuticos o espirituales destaca varios puntos de preocupación en términos de salud pública. Aquí están los principales aspectos resaltados:
- Falta de evidencia médica sólida: Aunque algunas comunidades perciben beneficios en el bienestar al consumir psicodélicos como el LSD, MDMA o la ketamina, aún no se ha establecido científicamente si estos efectos son realmente beneficiosos para la salud. La falta de supervisión médica adecuada puede exponer a los usuarios a riesgos significativos.
- Legalización en ciertas regiones: Países como Costa Rica, Jamaica, México, y varios estados de EE.UU. y Canadá han legalizado el uso de psicodélicos, convirtiéndose en destinos para retiros guiados con estas sustancias. Esto ha creado un mercado turístico en torno a experiencias psicodélicas, pero también ha facilitado el uso no supervisado, lo cual preocupa a la ONU por sus implicaciones en la salud y el tráfico ilegal.
- Distinción entre usos tradicionales y modernos: La ONU subraya la diferencia entre el uso tradicional de psicodélicos en ceremonias espirituales por comunidades indígenas y el uso contemporáneo en contextos recreativos o terapéuticos sin supervisión adecuada. Esta distinción es importante porque el uso no regulado puede tener efectos negativos en la salud mental y el bienestar social de los consumidores.
- Problemas asociados al mercado de drogas: Además de los riesgos para la salud individual, el aumento en el consumo de nuevas sustancias psicoactivas conlleva preocupaciones sobre el tráfico ilegal y los problemas sociales derivados de un uso no controlado y potencialmente peligroso.
En resumen, aunque hay un renovado interés en los psicodélicos por sus supuestos beneficios terapéuticos y espirituales, la falta de evidencia médica definitiva y la proliferación de un uso no supervisado son motivo de preocupación para la ONU y para la salud pública en general.