Organizaciones y autoridades conmemoran el Día Mundial del Refugiado en la frontera sur de México
Este viernes, diversas organizaciones de la sociedad civil y autoridades locales celebraron el Día Mundial del Refugiado en la frontera sur de México, un espacio que se ha convertido en un punto crítico para cientos de personas en movilidad internacional que han quedado varadas debido al endurecimiento de las políticas migratorias del gobierno de Estados Unidos, encabezado por el presidente Donald Trump.
La Coordinadora del Servicio Jesuita a Refugiados (SJR), América Pérez, destacó que esta conmemoración busca reconocer la resistencia y valentía de quienes se ven obligados a huir de sus países, no por elección, sino por necesidad.
“Es un día para visibilizar la hospitalidad y la solidaridad entre las comunidades locales y las personas refugiadas, reconociendo que quienes huyen no lo hacen por voluntad propia, sino porque las circunstancias los obligan a hacerlo”, subrayó Pérez.
Tapachula, epicentro de la crisis migratoria
En Tapachula, la ciudad más grande en la frontera entre México y Guatemala y uno de los principales focos de la crisis migratoria regional, la directora municipal de relaciones internacionales y desarrollo transfronterizo, Denisse Lugardo Escobar, resaltó la importancia de la multiculturalidad y la contribución económica y cultural de la población migrante, a pesar de los desafíos que enfrentan.
“Celebramos la multiculturalidad. La comunidad migrante en Tapachula aporta no solo culturalmente, sino también económicamente. El 65% de las personas que residen aquí lo hacen de manera legal”, indicó Lugardo, señalando que la mayoría proviene de países como Haití, Cuba y Venezuela.
Testimonio de una migrante refugiada
Una de las personas que ha vivido esta realidad es Yeni Limonta, migrante cubana refugiada, quien relató las dificultades para encontrar empleo digno, una situación común entre quienes migran.
“En muchos trabajos explotan a los migrantes. Sin embargo, cuando logras la residencia permanente tienes más derechos y acceso a un empleo justo”, lamentó Limonta, quien gracias al apoyo de organizaciones e instituciones pudo continuar su trámite migratorio.
Reducción de apoyo internacional y cierre de oficinas de ACNUR
En 2024, México mantuvo una de las cifras más altas de solicitudes de asilo en el mundo, con cerca de 80 mil solicitudes registradas por la Comisión Mexicana de Ayuda al Refugiado (COMAR), principalmente de personas procedentes de Honduras, Cuba, Haití y El Salvador.
No obstante, la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) enfrenta importantes recortes presupuestales, debido a la disminución de financiamiento proveniente de Estados Unidos y otros donantes internacionales. Recientemente, ACNUR anunció la reducción de 3,500 empleos y un recorte del 30% en su plantilla, lo que ha llevado a reconfigurar sus operaciones, particularmente en el sur de México.
Manuel Nucamendi Pulido, jefe de Oficina de ACNUR en México, reconoció que estos recortes han obligado a modificar la manera de trabajo, afectando especialmente las oficinas de la zona sur. Como resultado, ACNUR confirmó el cierre de sus oficinas en Palenque y Tuxtla Gutiérrez.
La conmemoración del Día Mundial del Refugiado en la frontera sur de México puso en evidencia tanto la resiliencia de las personas migrantes y refugiadas, como los retos humanitarios que enfrentan en un contexto de políticas migratorias más restrictivas y reducción del apoyo internacional.
