Por qué EEUU celebra su independencia el 4 de julio 


El 4 de julio es una fecha crucial para Estados Unidos, ya que conmemora el día en que el Congreso proclamó la independencia formal del país de Gran Bretaña en 1776. Esta declaración marcó el inicio de Estados Unidos como una nación soberana y autónoma, aunque la guerra para asegurar esa independencia continuó durante varios años más.

La Declaración de Independencia, redactada por Thomas Jefferson y firmada por representantes de las Trece Colonias, estableció principios fundamentales de libertad, igualdad y derechos inalienables que son centrales para la identidad estadounidense hasta el día de hoy.

Las celebraciones del Día de la Independencia se remontan al año siguiente de la firma de la declaración, con eventos que incluían fuegos artificiales y celebraciones comunitarias. La tradición de los fuegos artificiales se originó en 1777 en Filadelfia y desde entonces ha sido una parte integral de las festividades, culminando en grandes espectáculos como el de Nueva York, patrocinado por Macy’s.

A lo largo de los años, el 4 de julio ha evolucionado para convertirse en un día de celebración nacional marcado por barbacoas, reuniones familiares, viajes de verano y un sentimiento general de patriotismo. Además, ha crecido como un momento para reconocer la diversidad cultural del país, conmemorando la contribución de inmigrantes que han enriquecido la sociedad estadounidense desde el siglo XIX.

Hoy en día, el 4 de julio sigue siendo un feriado nacional en Estados Unidos, celebrado con entusiasmo en todo el país como un recordatorio de los ideales fundamentales sobre los cuales se fundó la nación y como una ocasión para unir a las personas a través de su identidad nacional y cultural diversa.