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Al menos cuatro periodistas de distintos medios de comunicación salvaron la vida tras quedar atrapados en un enfrentamiento armado mientras cubrían un hecho violento en la comunidad de El Pozo, sindicatura de Imala, en Culiacán, Sinaloa.
Según reportes locales, el tiroteo se produjo este lunes entre una unidad blindada y una cuatrimoto con tres ocupantes. Uno de los comunicadores habría sido blanco directo de los disparos, y su vehículo resultó impactado por las balas. Aunque ninguno de los periodistas resultó herido, algunos tuvieron que refugiarse en casas cercanas para protegerse del fuego cruzado.
Condena de organizaciones de periodistas
Tras los hechos, la Asociación de Periodistas y Comunicadores 7 de Junio, de Sinaloa, emitió un comunicado en el que condenó la agresión y exigió condiciones seguras para el ejercicio del periodismo.
“Lamentamos los actos de violencia registrados en la sindicatura de Imala, donde algunos colegas fueron atacados a balazos por grupos antagónicos de la delincuencia organizada, mientras realizaban una cobertura periodística”, expresó la organización.
La asociación subrayó que desde hace diez meses periodistas de la región han documentado el recrudecimiento de la violencia, enfrentando amenazas, hostigamientos e intentos de censura.
“Quienes cubren hechos violentos lo hacen para mantener a la ciudadanía informada y han logrado evidenciar y narrar grandes historias, muchas de ellas ignoradas por las autoridades”, añadieron.
También alertaron que estos ataques no solo ponen en riesgo la vida de los periodistas, sino que afectan directamente la libertad de expresión y el derecho de la ciudadanía a saber lo que ocurre.
Llamado a garantizar la seguridad del gremio
La organización exigió a las autoridades garantizar coberturas seguras, sin importar la localidad o la gravedad del conflicto, y recordó que el trabajo periodístico es esencial para la democracia:
“Sin periodistas, una gran cantidad de hechos no se sabrían. Reiteramos que nuestra única prioridad es la ciudadanía”.
Actuación de la Comisión Estatal de Derechos Humanos
Por su parte, la Comisión Estatal de los Derechos Humanos de Sinaloa (CEDH) también condenó el ataque y anunció el inicio de una investigación de oficio. Su presidente, Óscar Loza Ochoa, ordenó solicitar informes a las autoridades correspondientes y establecer medidas cautelares a favor de los reporteros afectados.
“La CEDH Sinaloa expresa su solidaridad y apoyo a los compañeros periodistas agredidos, así como al gremio en general. Sin su labor, la sociedad sinaloense no podría mantenerse informada con veracidad”, señaló el organismo en un comunicado.
La comisión reconoció además el profesionalismo y compromiso del gremio periodístico en Sinaloa, especialmente en un contexto donde la violencia criminal representa una amenaza constante para quienes informan.
La agresión ocurre en un estado históricamente afectado por el crimen organizado y donde el periodismo de investigación y cobertura policiaca se ejerce con altos riesgos, por lo que organizaciones defensoras de la libertad de prensa han reiterado su llamado a que se implemente un mecanismo efectivo de protección para periodistas en el país.
