Putin lidera reunión con el Estado Mayor ruso para abordar la situación en la región de Kursk

Putin presidió reunión con el Estado Mayor y las agrupaciones militares del Ejército sobre la situación en la región fronteriza de Kursk

El presidente ruso, Vladímir Putin, encabezó una reunión con el Estado Mayor y la dirección unificada de las agrupaciones militares del Ejército para abordar la situación en la región fronteriza de Kursk, donde desde el 6 de agosto se ha registrado una incursión ucraniana.

Durante la reunión, el Estado Mayor presentó un informe detallado sobre las acciones emprendidas para contrarrestar las fuerzas ucranianas que han penetrado en territorio ruso. Según el Ministerio de Defensa, se han tomado medidas significativas para “la destrucción” de estas fuerzas, y se ha decidido establecer tres nuevas agrupaciones militares para reforzar la seguridad en las regiones de Kursk, Bélgorod y Briansk.

Este encuentro se produce en un contexto en el que se cumplen dos años y medio desde el inicio de la campaña militar rusa. A pesar de los esfuerzos rusos, el ejército no ha logrado consolidar el control sobre las cuatro regiones ucranianas que, sobre el papel, fueron anexadas en septiembre de 2022.

El Ministerio de Defensa reportó que se han repelledido cuatro ataques de unidades de asalto enemigas en Kursk, aunque Kiev continúa avanzando, según informes de Kiev y el Instituto para el Estudio de la Guerra. El comunicado castrense estimó que las fuerzas ucranianas han sufrido más de 5.500 bajas desde el inicio de la operación en Kursk, con aproximadamente 360 bajas en las últimas 24 horas.

Asimismo, el Ministerio para Situaciones de Emergencia informó que alrededor de 3.200 personas han sido evacuadas de las zonas de peligro en la región de Kursk en los últimos días.

En un desarrollo relacionado, Rusia y Ucrania realizaron el sábado un intercambio de prisioneros de guerra, con 230 prisioneros intercambiados (115 por cada lado) mediado por Emiratos Árabes Unidos. La Defensora del Pueblo ruso, Tatiana Moskalkova, confirmó que muchos de los canjeados eran reclutas rusos, lo que generó conmoción y preocupación entre sus familias.

La incursión en Kursk ha provocado una notable caída en la popularidad de Putin desde el inicio de la guerra en febrero de 2022.