Sheinbaum anuncia que México esperará hasta el 2 de abril para decidir medidas recíprocas ante los aranceles de EE. UU.

La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, anunció este martes que el gobierno mexicano esperará hasta el 2 de abril para determinar si tomará medidas recíprocas frente a la aplicación general de aranceles impuestos por Estados Unidos a las importaciones de acero y aluminio, incluido México.

En su conferencia matutina, Sheinbaum precisó que, tras la visita del secretario de Economía, Marcelo Ebrard, a Washington, se acordó continuar con las reuniones con el gobierno estadounidense sobre este tema y esperar los resultados de las negociaciones. La mandataria recordó que Ebrard sostuvo reuniones con el secretario de Comercio de EE. UU., Howard Lutnick, y que con base en estos encuentros, ella se reunirá con los productores nacionales de acero y aluminio para tomar una decisión definitiva en la fecha acordada.

“Vamos a esperar al 2 de abril para ver si tenemos que tomar una acción de reciprocidad, como está haciendo Estados Unidos. Hay una muy buena relación con los productores nacionales, pero debemos esperar a esa fecha para tomar una resolución definitiva”, señaló Sheinbaum.

La presidenta destacó que el 2 de abril no solo es la fecha establecida por el presidente estadounidense Donald Trump para revisar los avances de la coordinación bilateral entre ambos países, sino que también coincide con el momento en que Estados Unidos implementará los aranceles generales a todas las naciones, lo que podría incluir a México si no se llega a un acuerdo.

Además, a pregunta expresa sobre los riesgos de una recesión global, Sheinbaum reconoció las preocupaciones sobre la caída de las bolsas y la situación económica mundial, pero confió en que México podrá salir adelante. “La virtud de esperar hasta el 2 de abril es que es la fecha de decisión del gobierno de Estados Unidos sobre los aranceles. Vamos a esperar para ver cómo queda el marco internacional de las importaciones”, agregó.

En cuanto a la economía interna, Sheinbaum también mencionó que México tiene una línea de crédito abierta con el Fondo Monetario Internacional (FMI), aunque aseguró que no se contempla usarla por el momento. “Vamos bien con la recaudación fiscal, no creo que sea necesario tomar el crédito, pero si se necesitara, ahí está”, dijo. Destacó que, en caso de recurrir a este crédito, no aceptaría condicionamientos como en los tiempos neoliberales, cuando se imponían políticas públicas que afectaban a sectores como la educación y la salud.

La mandataria también subrayó que el fortalecimiento del peso mexicano es reflejo de la solidez de la economía del país. “El modelo económico de nuestra administración está basado en un nuevo principio: ‘por el bien de todos, primero los pobres’. Los programas de bienestar no solo mejoran la calidad de vida de los más necesitados, sino que también impulsan el mercado interno”, concluyó.