Sheinbaum descarta acarreados en la asamblea del Zócalo de la CDMX
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, anunció el envío de una nota diplomática al gobierno de Estados Unidos, en respuesta a las declaraciones de Cart Weiland, alto funcionario del Buró de Narcóticos Internacionales y Aplicación de la Ley del Departamento de Estado estadounidense.
Durante su conferencia matutina en Palacio Nacional, Sheinbaum criticó que Weiland opinara sobre la asamblea organizada por su gobierno el pasado domingo en el Zócalo de la Ciudad de México y aseguró que no corresponde a funcionarios extranjeros hacer valoraciones sobre actos internos del país.
“Primero, una nota diplomática, porque también dio su opinión sobre el evento del domingo y la verdad pues no tendría por qué en un evento de Naciones Unidas estar opinando sobre un evento de México”, expresó la mandataria.
Asimismo, enfatizó que México mantiene una colaboración permanente con el gobierno de EE.UU. en temas de seguridad y combate al narcotráfico, y que las instituciones de ambos países trabajan de manera coordinada en investigaciones criminales.
Las declaraciones de Weiland en la ONU
Cart Weiland emitió sus críticas durante la reunión anual de la Comisión de Estupefacientes de Naciones Unidas, celebrada en Viena. En su intervención, se refirió a la asamblea del domingo 9 de marzo en el Zócalo y cuestionó la estrategia de seguridad del gobierno mexicano.
“Ayer hubo una gran fiesta en el Zócalo. Mucha música, mucha fiesta. Tal vez todos estaban aplaudiendo el fin de ‘Abrazos, no balazos’”, dijo el funcionario estadounidense.
Weiland agregó que la violencia en México sigue siendo una preocupación, señalando casos como el de Guanajuato, donde, según él, continúan los asesinatos de mujeres y niños a manos del crimen organizado.
“Parece demasiado pronto para celebrar, cuando mujeres y niños están siendo asesinados a tiros en lugares como Guanajuato. Estados Unidos ciertamente aprecia el nuevo enfoque que la señora Sheinbaum ha aplicado al problema”, concluyó.
La postura del funcionario generó molestia en el gobierno mexicano, que ahora busca respuestas por la vía diplomática.