Sheinbaum descarta vínculos de su gobierno con empresarios ligados a Pegasus
Durante su conferencia matutina de este martes, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, rechazó categóricamente que su gobierno mantenga algún tipo de vínculo o negociación con los empresarios israelíes involucrados en la venta del software espía Pegasus al gobierno mexicano, que fue utilizado para espiar a periodistas, activistas y políticos durante la administración de Enrique Peña Nieto.
Ante las preguntas de los medios sobre la investigación en curso por el uso de Pegasus, Sheinbaum señaló que corresponde a la Fiscalía General de la República (FGR) solicitar la información necesaria a las autoridades israelíes y destacó que no existe relación alguna entre el gobierno mexicano actual y los empresarios implicados.
“A partir de lo que mencionó aquí el fiscal, es que se abrió una investigación y corresponde al fiscal poder solicitar toda la información que se requiera, no solamente en México, sino en cualquier país”, puntualizó la mandataria.
La presidenta fue cuestionada tras las revelaciones del periodista israelí Gur Meggido, quien en un informe de The Marker detalló un arbitraje legal entre dos empresarios israelíes involucrados en la comercialización de Pegasus, y que, según él, continúan buscando hacer negocios con el gobierno mexicano.
En respuesta a esta información, Sheinbaum afirmó que no existe evidencia de que los empresarios mencionados hayan tenido contacto con las dependencias del gobierno de México, particularmente con la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana.
“No, por lo menos con el gobierno, con la Secretaría de Seguridad, las secretarías del Gobierno de México, no”, dijo la mandataria.
La investigación sobre Pegasus
El caso de Pegasus ha sido uno de los escándalos más sonados en México en los últimos años, tras la revelación de que el software espía, comprado durante el gobierno de Peña Nieto, fue utilizado para hackear los teléfonos de periodistas, defensores de derechos humanos, políticos y miembros de la oposición. Esto generó una fuerte condena tanto dentro como fuera del país, poniendo en cuestión la utilización de recursos públicos para la vigilancia de ciudadanos.
La FGR ha abierto una investigación sobre el uso de Pegasus, y se ha comprometido a obtener la información necesaria de las autoridades israelíes para determinar cómo se llevó a cabo el proceso de adquisición y utilización del software, así como las personas responsables.
Continúa la controversia sobre Pegasus
A pesar de los esfuerzos de la actual administración para distanciarse del escándalo, los informes internacionales sugieren que los involucrados en la venta del software espía continúan buscando la manera de hacer negocios con el gobierno mexicano, lo que ha causado preocupación sobre posibles intentos de “normalizar” la relación con los empresarios implicados.
Aunque Sheinbaum y su equipo de gobierno han sido enfáticos en asegurar que no existen vínculos actuales con los empresarios mencionados, la polémica sigue vigente y las investigaciones continúan bajo la supervisión de la Fiscalía.
Este caso sigue siendo un tema delicado para el gobierno mexicano, que enfrenta el desafío de mantener la confianza de la ciudadanía en cuanto a la protección de derechos fundamentales como la privacidad y la libertad de expresión.