Sheinbaum enfrentará tensiones internacionales al asumir la presidencia de México

Al tomar posesión de la presidencia de México, Claudia Sheinbaum heredará las tensiones que el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador ha mantenido con Ecuador, España y Perú, así como las repercusiones de su ausentismo en el ámbito internacional. Además, se verá ante el reto de lidiar con las elecciones presidenciales en Estados Unidos, que podrían cambiar la dinámica de la relación bilateral.

La primera mujer presidenta de México se enfrentará a “varios retos fundamentales que demandan atención inmediata y estratégica”, advierte José Joel Peña, profesor de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Según el experto, uno de los principales objetivos será restablecer relaciones diplomáticas con países de los que México se ha distanciado, ya sea por la inercia de la política exterior o por malentendidos. Los casos más urgentes incluyen Ecuador, Perú y España.

Sheinbaum tuvo un choque reciente con España debido a la decisión de no invitar al rey Felipe VI a su investidura el 1 de octubre. Esto se deriva de una carta que López Obrador envió al monarca en 2019, en la que solicitaba una disculpa por los abusos durante la conquista, y de su declaración de “pausa” en las relaciones en 2022.

En cuanto a Ecuador, las relaciones se tensaron aún más después de que México presentó una demanda en abril ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) tras el allanamiento en la Embajada mexicana en Quito para arrestar al exvicepresidente Jorge Glas. Por su parte, las relaciones con Perú se enfriaron tras los comentarios de López Obrador sobre la presidenta Dina Boluarte, a quien calificó de “espuria” tras el autogolpe de Estado de Pedro Castillo en 2022, afectando la Alianza del Pacífico.

En el contexto de las elecciones en Estados Unidos, Sheinbaum tendrá que lidiar con la política de quien resulte ganador. Si el expresidente Donald Trump regresa al poder, se espera un discurso más agresivo contra la inmigración y posibles amenazas de medidas drásticas contra México, como bombardeos a narcotraficantes y aranceles comerciales. Por otro lado, si Kamala Harris, actual vicepresidenta y candidata demócrata, gana las elecciones, su enfoque en la seguridad fronteriza también podría afectar las relaciones entre ambos países.

López Obrador, quien gobernó México desde 2018 bajo el lema “la mejor política exterior es la interior”, realizó solo siete giras al extranjero durante su mandato. Sheinbaum ha indicado que mantendrá una política similar de “no viajar mucho” y aún está evaluando su asistencia a la cumbre del G20 en Brasil en noviembre, que sería su primera visita de Estado.

Peña anticipa una “continuidad” en la política exterior de Sheinbaum, pero también sugiere que podría haber una “ventana de oportunidad” para aumentar la participación de México en foros regionales e internacionales, lo que permitiría al país tener una voz más influyente en la toma de decisiones globales.