Sheinbaum reafirma que la reforma judicial es una decisión del pueblo y será implementada en 2025

Ciudad de México,— La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, reiteró hoy que la reforma al Poder Judicial es un mandato del pueblo mexicano y será una realidad el próximo año. En su conferencia matutina desde Palacio Nacional, Sheinbaum dejó claro que esta reforma, aprobada y publicada en la Constitución, marcará un cambio significativo en el proceso de elección de jueces, magistrados y ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).

“Esto tiene que hacerse. La reforma judicial ya fue aprobada, ya está en la Constitución, y los jueces, magistrados y ministros serán electos en junio del próximo año”, afirmó la presidenta. Asimismo, subrayó que la decisión fue tomada por el pueblo mexicano, y que la nueva estructura de la SCJN reducirá el número de ministros de 11 a nueve, con un proceso de elección paritario. Además, el Tribunal Judicial será responsable de sancionar a jueces bajo reglas claras.

Sheinbaum también enfatizó que cualquier intento de cuestionar la reforma en tribunales nacionales o internacionales carece de sustento. “Esto ya fue sancionado, ya se publicó, ya es parte de la Constitución. Cualquier asunto que quiera definirse en la Suprema Corte o en instancias internacionales no tiene fundamento”, agregó.

La presidenta mexicana también defendió el proceso de reforma, afirmando que se llevará a cabo con transparencia y con la participación de los candidatos más calificados. “El pueblo de México decidió y esto va a ocurrir. Que sean los mejores quienes participen en este proceso”, subrayó.

La reforma, publicada en el Diario Oficial de la Federación el 15 de septiembre, ha generado controversia y un paro laboral en el Poder Judicial desde el 21 de agosto, con trabajadores argumentando que sus derechos laborales se ven afectados. No obstante, Sheinbaum reiteró su respeto hacia los empleados del sector, aunque expresó su desacuerdo con las prácticas llevadas a cabo en años recientes.

Este cambio, que establece la elección por voto popular de los funcionarios judiciales, marca un hito en el sistema jurídico mexicano y tiene como objetivo transformar la manera en que se designan a los jueces y ministros del país.