Sin agua desde el lunes
A partir del lunes 9 de junio, la Comisión Estatal del Agua suspenderá el suministro de agua potable en Guaymas y Empalme debido al inicio de trabajos de rehabilitación en el acueducto Río Yaqui, una infraestructura clave para el abastecimiento en la región.
Confirmando el aviso emitido la semana pasada, las labores se realizarán entre el kilómetro 32 y el 42 del acueducto.
Se trata de una obra de reparación necesaria para mejorar el suministro y garantizar su continuidad a mediano y largo plazo, según confirmaron las oficinas locales de la CEA encabezadas por Rafael Adrián Orduño Dávalos en Guaymas y Dámaris Ponce en Empalme.
La suspensión afectará a un estimado del 60 por ciento de los usuarios en ambos municipios, lo que significa que decenas de colonias podrían quedarse sin agua durante un periodo que podría extenderse de tres a seis días, dependiendo del avance de los trabajos.
“Contaremos con cuadrillas especiales para agilizar las maniobras en la infraestructura y reducir el tiempo de afectación”, señaló Orduño Dávalos.
Las acciones están respaldadas por la Vocalía Ejecutiva de la CEA y la Comisión Nacional del Agua, con el objetivo de asegurar el suministro del vital líquido a largo plazo.
La propia CEA hizo un llamado a la ciudadanía a adoptar medidas para el uso racional y responsable del recurso durante este periodo, ya que se prevé una baja considerable en los niveles de agua disponibles.
Se contempla también el apoyo con pipas gratuitas para las zonas que resulten más afectadas.
El llamado a la prevención incluye recomendaciones como el almacenamiento anticipado de agua, el uso moderado en actividades cotidianas y la comprensión ante esta situación que, aunque molesta, busca evitar problemas mayores en el futuro.
La rehabilitación del acueducto forma parte de una estrategia integral de mantenimiento de la red hídrica que ha sido señalada como prioritaria por el Gobierno de Sonora, ante la creciente demanda del servicio y las deficiencias históricas en el sistema.
“Sabemos que es una molestia momentánea, pero necesaria para evitar fallas graves más adelante”, expresó la administración estatal en el aviso difundido públicamente.