Tras reparaciones, el buque escuela Cuauhtémoc zarpa de Nueva York rumbo a México
El buque escuela mexicano Cuauhtémoc dejará el puerto de Nueva York este sábado, casi cinco meses después del accidente ocurrido el 17 de mayo, cuando la embarcación chocó contra la base del puente de Brooklyn, dejando un saldo de dos cadetes muertos, veinte heridos y daños estructurales que lo mantuvieron en reparación desde entonces.
Conocido como el “Caballero de los mares”, el emblemático navío de la Armada de México fue sometido a una serie de pruebas de navegación, comunicación y propulsión para garantizar que se encuentra en condiciones óptimas para retomar su travesía marítima.
Reparado y listo para surcar los mares
De acuerdo con el Gobierno de México, las pruebas técnicas validaron el correcto funcionamiento del sistema de navegación en modo normal y de emergencia, así como el estado de los equipos de comunicación, el desempeño del propulsor auxiliar y la resistencia del sistema de propulsión a vela.
Las reparaciones se llevaron a cabo en los astilleros Caddell Dry Dock and Repair Co. y GMD, ambos ubicados en la ciudad de Nueva York. El pasado 20 de septiembre, el buque fue trasladado al muelle 86, en el río Hudson, donde ha permanecido abierto a visitantes y ha recibido homenajes en memoria de las víctimas.
Este sábado, el Cuauhtémoc zarpará nuevamente con 171 nuevos cadetes y tres oficiales, quienes se integran al curso de adiestramiento naval a bordo del buque escuela.
Una tragedia que marcó a la tripulación
El 17 de mayo, durante una maniobra de zarpe, el Cuauhtémoc, con 277 tripulantes a bordo, impactó contra la estructura del puente de Brooklyn. El incidente provocó la muerte de los cadetes América Yamileth Sánchez y Adal Yahir Maldonado, así como heridas a veinte personas y daños severos a tres de los mástiles del barco, lo que obligó a una intensa movilización de cuerpos de emergencia en la ciudad.
El caso generó conmoción tanto en México como en Estados Unidos, donde se llevaron a cabo ceremonias en honor a los jóvenes fallecidos.
Un legado de formación naval
Botado en 1982, el Cuauhtémoc ha sido un pilar en la formación de oficiales de la Armada mexicana durante 43 años. Lleva el nombre del último emperador mexica, y representa uno de los símbolos más visibles de la diplomacia naval y la identidad marítima del país.
Ahora, tras superar uno de los episodios más difíciles en su historia, el Cuauhtémoc inicia el regreso a aguas mexicanas, renovado y listo para seguir con su misión formativa.