Uno de cada 3 enfermos de viruela del mono en Burundi son menores de 5 años

Buyumbura, Burundi – El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) informó que casi un tercio de los pacientes infectados por la mpox en Burundi, país de África Oriental, son niños menores de cinco años. La situación es alarmante, ya que los menores representan el grupo más afectado por la epidemia, lo que plantea serias preocupaciones sobre su vulnerabilidad y capacidad de recuperación.

“Los niños de Burundi son los primeros afectados por la epidemia, con tasas de infección alarmantes y graves efectos para la salud”, declaró Paul Ngwakum, consejero regional de Salud en Unicef para África Oriental y Meridional. Durante una videoconferencia desde Buyumbura, Ngwakum destacó que los menores de 19 años conforman dos tercios de los casos registrados en el país, siendo los niños menores de cinco años los más afectados, con un 30% de los casos notificados.

El especialista también advirtió que muchos de estos niños ya enfrentaban otras enfermedades como el sida y la malaria, lo que agrava su situación debido a un sistema inmunológico debilitado. “El tratamiento será crucial para evitar que mueran”, subrayó Ngwakum, haciendo hincapié en la urgencia de asistencia médica para los más pequeños.

Burundi es el segundo país más afectado por la epidemia de mpox en África, solo por detrás de la República Democrática del Congo (RDC), según la agencia de salud de la Unión Africana. La mpox, conocida anteriormente como viruela del mono, es una enfermedad viral que se transmite de animales a humanos, pero también entre personas. Los síntomas incluyen fiebre, dolores musculares y lesiones cutáneas, lo que puede ser especialmente peligroso en niños.

El reciente rebrote de la mpox en África ha sido vinculado a una nueva variante, el clado 1b, que surgió en la RDC. La gravedad de la situación llevó a la Organización Mundial de la Salud (OMS) a activar su nivel más alto de alerta global a mediados de agosto. De acuerdo con la OMS, entre enero y el 8 de septiembre, se han registrado 25,093 casos sospechosos de mpox y 723 muertes en todo el continente africano.

El avance de la enfermedad en Burundi ha encendido las alarmas entre las agencias de salud, que luchan por contener la propagación y brindar tratamiento adecuado a los pacientes. La alta incidencia entre los menores subraya la necesidad de reforzar las medidas de prevención y atención médica, especialmente en áreas donde las condiciones de salud preexistentes agravan los efectos de la epidemia.

La situación en Burundi refleja un desafío regional más amplio en la lucha contra la mpox, y las autoridades de salud internacionales continúan trabajando para mitigar su impacto, en especial entre los grupos más vulnerables como los niños.