A pesar de la prohibición oficial para la venta de pirotecnia, en los municipios de Guaymas y Empalme continúa la distribución ilegal de cohetes y fuegos artificiales. A través de redes sociales como Facebook, al menos cuatro grupos de compra-venta han sido utilizados para ofrecer estos productos de manera abierta.
En las publicaciones se promociona una amplia variedad de artículos pirotécnicos, desde luces de bengala hasta cohetes de mayor potencia.
Al contactar a uno de los números telefónicos proporcionados en los anuncios, una persona del sexo femenino se negó a revelar la ubicación del punto de entrega y condicionó la venta a que el comprador realizara previamente una transferencia electrónica por el total del pedido, lo que evidencia un esquema de comercialización clandestino.
De acuerdo con la información recabada, las bolsas de pirotecnia de bajo impacto, como luces de bengala, se ofrecen en precios que oscilan entre 250 y 300 pesos, mientras que los productos con mayor cantidad de pólvora pueden alcanzar costos de 500 pesos o más, dependiendo del tipo y tamaño del artefacto. Estas prácticas no solo violan la normativa vigente, sino que también representan un riesgo para la seguridad de quienes los adquieren y utilizan.
La semana pasada, el Gobierno de Sonora confirmó la restricción en la venta de pirotecnia en la vía pública, disposición que debe ser acatada por todos los ayuntamientos del estado.
En este contexto, el Ayuntamiento de Guaymas prohibió por tercer año consecutivo la comercialización de cohetes, mientras que en Empalme por primera vez no se otorgaron permisos para la instalación de puestos de venta durante la temporada decembrina.
Sin embargo, pese a estas medidas, continúan registrándose quejas ciudadanas al número de emergencias 911 por detonaciones de cohetes en distintas colonias, entre ellas San Vicente, Sahuaripa, el Centro y sectores de Guaymas Norte. Vecinos han manifestado su preocupación por el ruido excesivo, el riesgo de incendios y las afectaciones a personas adultas mayores, menores de edad y animales de compañía.
Hasta el momento, no se ha informado de decomisos o aseguramientos de pirotecnia por parte de la Secretaría de la Defensa Nacional ni de las corporaciones policiales municipales de Guaymas y Empalme, lo que ha generado cuestionamientos sobre la vigilancia y aplicación de la ley.
Autoridades han reiterado en años anteriores que el uso y venta de pirotecnia sin autorización constituye un delito federal, además de representar un riesgo grave para la integridad física de la población.
No obstante, la persistencia de este mercado ilegal evidencia la necesidad de reforzar los operativos de inspección, así como de fomentar la denuncia ciudadana para prevenir accidentes durante las celebraciones de fin de año.
