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Violencia inusitada en Sinaloa: asesinatos, bloqueos y explosiones generan alarma en el estado

Durante el fin de semana, el estado de Sinaloa vivió una jornada de violencia especialmente intensa, con múltiples asesinatos, bloqueos carreteros y ataques con artefactos explosivos en distintas zonas de la entidad. Autoridades estatales y federales desplegaron operativos de emergencia ante una escalada que no se había visto con esta intensidad desde los llamados “Culiacanazos”.

Los hechos se concentraron principalmente en los municipios de Culiacán, Mazatlán, Guasave y Los Mochis. En Culiacán, se registraron al menos seis homicidios en distintos puntos de la ciudad, algunos de ellos con evidencias de tortura y mensajes amenazantes vinculados a pugnas internas entre grupos del crimen organizado. Uno de los cuerpos fue abandonado frente a una secundaria, lo que provocó la suspensión inmediata de clases en varias zonas.

En la carretera federal México 15, a la altura de Guasave, sujetos armados colocaron bloqueos con camiones incendiados y escombros. También se reportó el uso de “ponchallantas” (clavos soldados sobre estructuras metálicas) para impedir el tránsito de fuerzas de seguridad. La circulación se restableció después de varias horas, pero el tránsito de vehículos particulares sigue siendo limitado en algunos tramos.

Uno de los incidentes más graves ocurrió en las primeras horas del domingo, cuando un artefacto explosivo de fabricación casera fue detonado frente a una sede de la Guardia Nacional en las afueras de Mazatlán. Aunque no se reportaron muertos, dos elementos resultaron con lesiones leves y daños materiales significativos. Esta acción elevó el nivel de alerta en las fuerzas armadas desplegadas en la región.

Las autoridades no han atribuido oficialmente los ataques a un grupo específico, pero fuentes del gabinete de seguridad sugieren que se trata de una respuesta de facciones criminales a recientes detenciones y decomisos realizados en operativos conjuntos entre el Ejército y la Marina. En días previos, se había confirmado la captura de un operador financiero ligado a un cártel regional.

La situación ha generado temor entre la población, especialmente en áreas rurales y colonias periféricas. Comercios cerraron antes del horario habitual, el transporte público redujo rutas y muchas familias decidieron no salir de casa ante el temor de quedar atrapadas en algún enfrentamiento. En redes sociales circulan videos y audios con advertencias, aunque muchas de ellas no han sido verificadas.

El gobierno estatal convocó a una sesión extraordinaria del gabinete de seguridad, y se ha solicitado refuerzo inmediato de efectivos federales. También se instalaron retenes militares en las salidas de las principales ciudades para contener posibles desplazamientos de células armadas.

La Comisión Estatal de Derechos Humanos pidió a las autoridades garantizar la seguridad de los civiles y proteger especialmente a los menores, ante reportes de ataques en zonas escolares. Hasta el momento no se ha decretado toque de queda, pero se mantienen recomendaciones de permanecer en casa durante las noches.

Sinaloa enfrenta nuevamente un repunte de violencia en un contexto de reorganización interna de los grupos delictivos, lo que ha encendido las alertas de seguridad a nivel nacional.