Persiste Ferromex en política abusiva contra sus trabajadores
La empresa Ferrocarril Mexicano (Ferromex) persiste en su política abusiva y de explotación en contra de sus trabajadores, mediante la aplicación de convenios ya obsoletos que solo le favorecen, así como el de rescindir del contrato a trabajadores, a quién corre de palabra y no les da la resolución del supuesto despido.
Así lo aseguran los propios trabajadores afectados, en este caso de la rama de trenes, quienes aseguran que la empresa los quiere hacer trabajar más, pero con menores ingresos económicos, lo que obviamente no les parece justo, además de que por algún motivo algún percance sin justificación, los corre, responsabilizando de esto a los encargados de Relaciones Laborales de Nogales y Empalme, Reynols y Joel Guzmán, respectivamente.
Señalan que tal como se manifiesta en una circular que les hizo llegar la representación sindical de la Sección 8, la empresa quiere hacer válido un convenio que se signó en mayo de 2021, pero basado en uno que se había hecho en 2002.
Explican que Ferromex pretende que los trenes locales con dos garroteros realicen más movimientos de los convenidos para los trenes directos, lo que representa más trabajo y menos ingreso, comparado con una jornada laboral.
Cabe señalar que por un garrotero un tren debe de realizar solo tres movimientos, es decir, si corre de Nogales a Empalme, solo hacer tres en ese trayecto, que sería enganchar más góndolas, cortar el tren y realizar cambio de vía.
Sin embargo, la empresa, en base a dicho convenio, agrega un garrotero más al tren, pero busca que con esos dos se hagan los movimientos que sean necesarios, que pueden ser hasta quince, cuando en realidad solo deberían de ser seis, en el entendido que son tres por garrotero.
Y es que, en el distrito donde se pretende implementar dicho convenio, que es de Sufragio a Empalme, existen entre 12 a 15 industrias, y en cada una se realizaría al menos un movimiento, pero pueden ser más.
A través de la circular, la representación sindical pide a los trabajadores que por ningún motivo o favor acepten realizar más de tres movimientos, aun cuando el tren cuente con dos garroteros, al menos no hasta que se logre un convenio que sea en beneficio del trabajador.